Energía en 3D
Crear lo que no existe
León 3D ha desarrollado, con las técnicas de impresión y el internet de las cosas, los elementos de protección del sistema de eficiencia energética creado
«Nos dedicamos a crear cosas que no existen, y que es necesario desarrollar. Una empresa nos presenta una necesidad, y nosotros diseñamos la solución y la fabricamos con impresoras en tres dimensiones. Hacemos piezas únicas, o tiradas de hasta 800 o 1.000 unidades, depende del proyecto. Si hay que hacer tiradas más largas se realizan fuera, tras hacer los moldes de inyección de plástico».
León 3D realiza todo el proyecto de ingeniería para estas necesidades, desde el diseño a la elección de materiales y la impresión. Es una de las patas de su negocio, junto con el desarrollo, montaje y venta de impresoras de 3D, tanto para empresas como domésticas; y la fabricación de los consumibles. En apenas siete años este proyecto, que comenzó liderando el ‘movimiento maker’, es una empresa que crece a pasos agigantados, y que no deja de aportar soluciones para los procesos productivos que hasta ahora resultaban casi impensables. Y siguen innovando. Siempre innovando.
La impresión en 3D permite que la inversión por hotel se reduzca de 115.000 a 20.000 euros para fabricar las carcasas
Uno de sus últimos proyectos es la colaboración con el grupo Princess Hotels para desarrollar el sistema de gestión energética eficiente en los 19 establecimientos que tienen repartidos por Canarias, Barcelona, Riviera Maya y República Dominicana. La cadena de hoteles vacacionales y urbanos ha implantado un complejo sistema de gestión y controlen tiempo real de la energía «de una forma totalmente innovadora», según explican; para lo que han contado con «la impresión 3D y el internet de las cosas, lo que permite que el sistema aprenda de forma autónoma y regule los hábitos para optimizar el consumo energético en cada rincón de los complejos hoteleros. Un sistema de optimización tan avanzado que una sola persona puede controlar todos los mecanismos y sistemas del hotel desde su smartphone».
La innovación es constante en los consumibles que elabora la empresa. MARCIANO PÉREZ
Para desarrollar este ambicioso proyecto de eficiencia energética han contado con el desarrollo y la tecnología de la empresa León 3D, especializada en diseño e impresión. «El sistema permite monitorizar cada rincón de los hoteles, desde las cámaras de frío a la temperatura de las piscinas, la luz,... Todo lo relacionado con la energía. Ese control se realiza a través de unos aparatos eléctricos que, en cada punto en el que se colocan, necesitan elementos de protección adecuados, incluso bajo el agua», explica Jesús Fernández, ingeniero informático y director general de León 3D.
Con el confinamiento la demanda de impresoras 3d domésticas se ha duplicado
«En la empresa hemos diseñado y realizado todo tipo de adaptadores y ajustes para que estos aparatos medidores puedan funcionar. Incluso los engranajes para que cuando se abra la puerta de un garaje una cámara pueda grabar la matrícula».
Los hoteles tienen las impresoras que desarrolla la empresa leonesa, así que les envían el archivo con el desarrollo de ingeniería y pueden realizar las piezas que necesiten. «Esa es la esencia del 3D: fabricar a bajo coste piezas exclusivas y concretas, que no existen en las cadenas de producción. Y nosotros cubrimos la doble faceta, de diseño y producción».
La colaboración con el grupo hotelero es una más de las que León 3D realiza con empresas de gran tamaño, que tienen necesidades muy específicas y concretas para sus cadenas de producción. Empresas como Gullón, Vestas, Michelín, Soltra, Tragsa, Carglass, Louis Vuitton,... O la Policía y la Guardia Civil.
Princess Hotels puede imprimir las piezas que necesita. DL
En la nave actual, además de crear las impresoras 3D que venden a empresas o las domésticas que distribuyen a través de Leroy Merlin, la compañía cuenta con más de 40 impresoras que trabajan incansablemente; y un servicio de reparaciones que registra también un trasiego importante de material. Y maquinaria para realizar los consumibles (los cables de colores para las impresoras).
Las cifras actuales de León 3D apabullan. Además, según explica Fernández, a la creciente afición por utilizar estas impresoras como hobbie se ha unido una demanda que se ha disparado (hasta duplicarse entre abril y julio) con el confinamiento. La empresa vendía hasta ahora alrededor de 500 impresoras al año, además de las 3.000 que distribuye a través de la cadena comercial, y que también se montan en la nave leonesa.
Es la prometedora realidad de una empresa que nació como en las mejores historias de jóvenes con talento que acabaron convirtiendo su idea en un gran proyecto. Jesús Fernández es uno de los promotores del ‘movimiento maker’, la corriente de los aficionados a «hacerlo tú mismo». Un movimiento al que sigue alentando actualmente.
«Empecé en mi casa, después un amigo nos dejó un espacio en su nave, luego ocupamos un local en Párroco Pablo Díez y hace algo más de dos años nos trasladamos a la nave en el polígono industrial de Valverde de la Virgen».
Un proyecto iniciado en 2013, que ahora cuenta también con dos almacenes: uno en Madrid y otro en León, desde el que se atienden los pedidos on line. Y en el que llegaron a trabajar 30 personas. «Ahora somos cinco, porque decididos externalizar aquellos procesos en los que no éramos competitivos».
Por ejemplo las carcasas de las impresoras 3D. «Antes lo hacíamos todo nosotros, pero ahora importamos el armazón, porque tardábamos demasiado tiempo en hacerlos. Comprarlos es más barato y ofrece mejor calidad. Ahora nosotros seguimos haciendo las impresoras, y las montamos, pero estos elementos los compramos y nos centramos en los procesos de ingeniería y desarrollo».
El resto de los productos (salvo los colorantes plásticos) lo adquieren prácticamente en León, incluidas las miles de cajas de cartón que utilizan.
Y, dentro de esta intensa actividad, siguen manteniendo la innovación como parte fundamental del ADN de la empresa. Ahora investigan nuevas formulaciones de los plásticos, y siguen avanzando en el diseño de impresoras 3D, en las que son todo un referente.
Además, León 3D mantiene uno de los objetivos con los que está más comprometida: prestar especial atención al sector educativo, «en el que invertimos gran parte de los recursos, para crear soluciones formativas de calidad».