Biomar invierte 3 millones de euros en su nueva planta en el Parque Tecnológico

Una nueva planta de producción por fermentación que permita «llenar el hueco que existe entre la investigación y el desarrollo de los nuevos compuestos y la puesta del producto en el mercado». Es el objetivo de la ampliación de su sede en el Parque Tecnológico de León que ultima Biomar Microbial Technologies, en la que ha invertido tres millones de euros, una parte financiada por  la Junta de Castilla y León, a través del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (ICE). La planta que tiene ya activa la fase de fermentación ( upstream ). En dos meses, el próximo septiembre, estará operativa ya la segunda fase del proyecto, la extracción ( downstram ). En este momento se realizan las pruebas y validación de los equipos, previas a la puesta en marcha definitiva, que tendrá lugar antes del otoño.

Las nuevas instalaciones están además construidas «con todas las condiciones para poder obtener la certificación GMP (NFC) el próximo año, lo que nos permitirá la fabricación de medicamentos para su uso clínico».

Es el momento de crecimiento en el que se encuentra la compañía biotecnológica, según explican su consejero delegado, Antonio Fernández Medarde; y el responsable de Desarrollo de Negocio, Miguel Fernández Medarde. La nueva planta ocupa una superficie de 750 metros cuadrados y tiene tanques de fermentación de hasta 3.000 litros, que permiten a la empresa recuperar la actividad de producción (que había vendido en 2016 a la multinacional 4D Pharma); y ofrecer un servicio que no llega a la escala industrial, pero permite desarrollar en fase de producción las investigaciones que realizan para sus principales clientes.

En el Parque Tecnológico

La nueva planta se encuentra al lado del edificio que la compañía inauguró en 2009 en el Parque Tecnológico, y reemplaza el servicio que ponía en marcha un año después, con el incremento de su capacidad de producción con fermentadores de hasta 3.000 litros. Una actividad que ahora se retoma. Y está preparada además para ampliar su capacidad de producción cuando se requiera.

La previsión es que la producción se centre en el sector farmacéutico, para avanzar en los proyectos de investigación que desarrolla el equipo de científicos que trabaja en la empresa. La planta de fermentación permite acometer todo el desarrollo de las distintas fases del producto, hasta su puesta en el mercado. Y este es un proceso básico para que las empresas y laboratorios que contratan los servicios de Biomar MT puedan comprobar la fase práctica de los avances en las investigaciones.

Actualmente se realizan las pruebas y validación de los equipos, que entrarán definitivamente en funcionamiento en unas semanas. FERNANDO OTERO

«La nueva planta está dedicada a la realización de fermentaciones GMP (los estándares exigidos por las agencias de control farmacéutico para garantizar la calidad de los productos)». El equipo de la compañía biotecnológica leonesa tiene ya una dilatada experiencia en el desarrollo de fermentaciones de bacterias, hongos y actinomicetos, lo que permite que se ofrezca un «completo servicio» de desarrollo y fabricación por contrato.

Las nuevas instalaciones que ahora prueba Biomar tienen todos los equipos necesarios tanto para llevar a cabo las labores de fermentación, como de extracción de los compuestos. «Nuestra experiencia en fermentación microbiana viene de hace ya más de 15 años». La equipación de la planta que comenzará a funcionar en pocas semanas cuenta además con almacén de materias primas, área de dispensado, sala de preparación de inóculos, laboratorio de QC, sala de purifación Atex, sala blanca y almacén de producto intermedio y final».

Especialidades

Las principales líneas de investigación y proyectos que lleva a cabo Biomar se centran en los campos de la agricultura, alimentación, cosmética y salud. La compañía está especializada en microbiología marina y química de productos naturales, y es en la búsqueda de compuestos que producen los microorganismos marinos en los que centran sus desarrollos de I+D.

En el campo de la agricultura la compañía sigue el principio de desarrollar productos que cuiden tanto los cultivos como el suelo en el que se producen siempre conjugando el incremento de los rendimientos con las técnicas respetuosas con el medio ambiente. Porque las soluciones agrícolas basadas en microorganismos se degradan naturalmente, y no deterioran las tierras ni se acumulan en ellas.

La compañía leonesa ha desarrollado en los últimos años importantes alianzas estratégicas en este sector, para desarrollar nuevos compuestos fungicidas, herbicidas e insecticidas basados en su colección de extractos marinos.

Entre otros productos han desarrollado bioestimulantes, bactericidas para kiwis y alubias, herbicidas como el Thaxomin A, o biopesticidas como alternativas a los productos químicos tradicionales.

En lo que se refiere a los desarrollos llevados a cabo en los campos de la alimentación y la nutracéutica, Biomar está especializado en el aislamiento y fermentación de microorganismos y el desarrollo del potencial de sus colecciones de compuestos marinos, para desarrollar soluciones naturales para la industria de la alimentación tanto humana como animal.

Algunos de los proyectos en los que han avanzado en los últimos años se centran por ejemplo en el desarrollo de endulcorantes, como alternativa al azúcar. Y también en la producción de luteína, un carotenoide «de gran interés en la industria nutracéutica» porque tiene características que previenen la degeneración macular.

La nueva nave se ha construido al lado de la ya existente en el Parque Tecnológico. FERNANDO OTERO

También han desarrollado setami, un micelio comestible de alto contenido en proteínas y betaglucanos que se produce a través de residuos de la industria alimentaria, y se comercializa para alimentación animal y también para consumo humano, además de en cápsulas como complemento proteico.

Las investigaciones de Biomar alcanzan también el mercado del vino, con el aislamiento de una bacteria responsable de la fermentación maloláctica.

Otro de los campos de actuación de la empresa biotecnológica es la industria de la cosmética. En este ámbito los investigadores tienen ya una larga experiencia en el desarrollo de extractos, a través de su alianza entratégica con el grupo Infinitec Activos, para la que producen varios principios activos. Han desarrollado compuestos antiacné y antiarrugas, además de antioxidantes y productos anticaspa o blanqueantes.

Salud humana

Uno de los ámbitos en los que Biomar está centrando buena parte de su expansión investigadora es el campo de la salud humana. Concretamente, productos antiinfecciosos.

A su gran colección de compuestos, de gran diversidad química, se une el trabajo de investigación de científicos especializados en diversas patologías, que abarcan desde el cáncer a enfermedades neurodegenerativas, además de las infecciones.

Entre los compuestos en proceso de investigación están (en fase preclínica) un compuesto que presenta actividad neuroprotectora contra el daño neuronal, que inhibe la producción de radicales libres en neuronas sin signos de toxicidad; y que podría aplicarse en casos de ictus o alzhéimer.

La fase de extracción se pondrá en marcha en otoño. FERNANDO OTERO

También investigan en un antibióticos que inhibe el crecimiento específico de las bacterias Gramm negativas y cepas resistentes a la meticilina.

También en fase preclínica se encuentra el compuesto citotóxico para tratar el cáncer glioblastoma, que tiene una potente actividad en células troncales iniciadoras del tumor y que desarrollan quimioresistencia.

Otros compuestos se investigan para inhibidores de la linfoangiogénesis en el cáncer de mama, que reduce la posibilidad de metástasis; y tiene buenos resultados en retinopatías y psoriasis.

Identificación taxonómica

Entre los servicios que ofrece Biomar desde el Parque Tecnológico de León está el de identificación en sus laboratorios microbiológicos de microorganismos mediante técnicas moleculares; así como el aislamiento para identificar microorganismos en cualquier tipo de sustrato. Lo que permite identificar contaminantes en las industrias cosmética, farmacéutica, alimentaria o agrícola.