Un fondo de inversión entra en Tecnosylva y multiplicará su crecimiento en cuatro años

Hace casi diez años Joaquín Ramírez Cisneros, fundador y director ejecutivo de Tecnosylva , inició el camino de implantar su tecnología de simulación y prevención de incendios y emergencias en Estados Unidos.

Llevaba ya varios años investigando el mercado como profesor invitado en cursos de verano, y se lanzó a promocionar la tecnología que desarrollaba desde su sede en el Parque Tecnológico de León en un entorno con gigantescos incendios y muchos medios, pero poca tecnología. Su negocio y sus desarrollos han crecido exponencialmente en este tiempo, mientras la amenaza de los incendios incontrolados se ha convertido en un problema prioritario en todo el planeta.

Ahora Tecnosylva da un paso más en su crecimiento. Con un volumen de negocio y contratos creciente, su fundador desea centrarse en el desarrollo tecnológico. La gestión de un proyecto que sigue ganando contratos y sumando proyectos en todo el mundo requiere también otra fórmula.

La solución ha sido la entrada en el negocio del fondo de inversión estadounidense TA Associates, con el objetivo de cuadruplicar la actividad de la empresa en cuatro años. Y avanzar en crecimiento, innovación y empleo con el mismo objetivo de crecimiento exponencial. Con una condición. Mantener el ‘cerebro’ de Tecnosylva en León.

En su sede se han desarrollado todos los proyectos y aplicaciones que están aplicándose en todo el mundo, y así seguirá siendo. «Lo responsables del fondo de inversión han conocido nuestro trabajo en León, y es verdad que la pandemia y el cambio de modelo del trabajo nos ha ofrecido otras perspectivas que ahora utilizamos con una eficiencia mucho mayor. Saben que nuestro talento y nuestro corazón está aquí. Lo han visto y lo comparten.  En una década hemos pasado de menos de diez trabajadores a unos 60. Ahora empieza el crecimiento exponencial. Las herramientas se aplicarán en todo el mundo, seguiremos contando con profesionales excepcionales en diversos puntos del planeta. Pero el corazón de Tecnosylva se mantendrá en León. Es la filosofía de la empresa. Y buena parte de ese talento es local».

El fondo TA destaca de la ingeniería leonesa su desarrollo de soluciones innovadoras para la gestión de emergencias, enfocada sobre todo al sector de los incendios forestales. Y que centra la mayor parte de su negocio en Estados Unidos, donde han crecido desde California.

Allí trabajan con Calfire, una de las grandes agencias estatales que seleccionó a la tecnológica leonesa entre más de 130 compañías, para intentar controlar los devastadores efectos de los gigantescos incendios que se producen continuamente. «Las herramientas que hemos ido desarrollando y mejorando se utilizan hoy por miles de mandos en la gestión de incendios, y también tenemos contratos con las principales compañías eléctricas, cuya actividad origina parte de estos incendios», explica Ramírez.

El contrato llegó después del incendio que en 2018 arrasó la ciudad de Paradise, y dejó decenas de muertos y desaparecidos. «Tenían muchos medios, peo no ciencia ni tecnología en lo que hacían. Combatían los incendios como en los años 80. Realizaron una petición de ideas innovadoras, nos presentamos y nos seleccionaron». Hoy Calfire es la agencia más grande e innovadora, después del gobierno federal. «Y al que tiene los incendios más complicados, eso nos ha dado también gran visibilidad en los medios de comunicación». A partir de ahí han conseguido contratos con Florida, Texas, Tennessee, Kentucky, Virginia, Rhode Island, North Carolina, Georgia, Missisippi, Oclahoma, Corolado, Nuevo México, Arizona, Utah, Idaho, Montana, Oregon, Nevada. «Y estamos a punto de firmar el contrato con Washington».

Además de en Estados Unidos, y en algunas partes de España, «el contrato de más larga duración que hemos conseguido es organizar todo el sistema de simulación y mando de incendios forestales en Holanda. Ahí los incendios están creciendo, las condiciones climatológicas en el norte de Europa están cambiando rápidamente y eso se hace notar».

Tecnosylva tiene contratos también en Chile, Italia, Portugal, Bulgaria,... Incluso hemos hecho un proyecto en Arabia Saudí, donde han creado un parque natural relacionado con el mundo de la caza, y nos han encargado el sistema antiincendios».

En todos esos lugares trabajan con la tecnología que se desarrolla en León, y que sigue avanzando. «Siempre hemos estado centrados en los incendios forestales. Lo más vistoso son las operaciones para apagarlos, y tenemos la tecnología con la que los bomberos van al campo con las aplicaciones en el móvil, y se controlan desde las centrales, donde coordinan y conocen dónde está cada operativo, tienen mapas tácticos y pueden diseñar las operaciones y los objetivos».

Una de estas aplicaciones más novedosa es Tactical Analyst, «una plataforma que permite actuar como una operación casi militar, que es lo que se necesita cuando los fuegos se descontrolan y tienes que evacuar a miles de personas, hay gran pérdida dee casas,... Esta plataforma permite seguir el incendio y prever cómo va a evolucionar, qué medios hay y cómo deben actuar, se sigue la situación en tiempo real a través de centenares de cámaras, se desarrolla una cartografía táctica, se identifica dónde están las viviendas, las infraestructuras críticas, los puntos de agua,...».

Sólo en California más de 6.000 responsables comparten esa información y las instrucciones a través de su teléfono móvil, con un acceso sencillo. «Está diseñado para lo que se llama ‘fat finger’, botones grandes, para que sea fácil utilizarlos».

Todo este operativo se completa hoy cono aviones drones que captan más imágenes y permiten diseñar operaciones que comparte todo el personal.

«Además, hay un factor muy importante al que nos hemos dedicado siempre, que es la predicción. Cuando surge un incendio nosotros ya les decimos si es un 1 o un 5, si tienen que enviar o no a cuánta gente,...». Aunque para Ramírez lo más apasionante, y lo más importante también, es actuar antes de que se produzca el fuego. «Por eso hacemos predicciones a cinco días vista, con un altísimo nivel de detalle de qué puede pasar hora a hora. Esto es cada vez más importante, y lo hemos visto este verano. Que seamos proactivos, que antes de que empiece un incendio tengamos toda la información».

Para eso utilizan otra de las herramientas desarrolladas y que se ha ido mejorando con el tiempo, Wildfire Analyst. «Realiza millones de simulaciones, para estudiar todas las posibilidades. Si ya hay incendio, utilizamos Tactical Analyst para coordinar y compartir información. Y para gestionar todos los medios disponibles está la aplicación Fire Response. Sólo Calfire ha formado a 60 especialistas para manejar el software de Tecnosylva».

Cuando Joaquín Ramírez se instaló en Estados Unidos en 2013 fue con las primeras versiones de todas estas herramientas, y su evolució «ha sido exponencial. Entonces hacíamos una simulación y tardábamos cinco minutos. Hoy en una hora hacemos 500 millones de simulaciones a través de la supercomputación. Y lo hacemos todos los días».

Para ello utilizan los mapas de combustibles, vegetación,... Un trabajo previo que permite actuar y realizar predicciones con mucho detalle.

Todo este crecimiento tecnológico ha ido acompañado, o más bien impulsado, por «un equipo que ha crecido mucho también en talento. Casi todo leonés».

El director ejecutivo de Tecnosylva señala que en el aspecto laboral «el covid fue casi una oportunidad. No abrió una nueva manera de trabajar, que mantenemos porque nos permite contar con personas en todo el país, o en otros países».

De cara al futuro Ramírez confía en que la entrada del fondo de inversión TA «nos ayude en nuestro crecimiento. Ahora trabajamos con las mejores empresas eléctricas de Estados Unidos, pero son una docena, y queremos trabajar con las 2.000 que hay. Y queremos entrar también en este mercado en España, Europa y Sudamérica. A nivel global. Porque en el riesgo de incendios provocados por las eléctricas no hay nadie que haga predicciones como las nuestras, esa es la clave».

Trabajar más en España es uno de los deseos del fundador de la tecnológica leonesa. «Sería ideal además que las distintas agencias colaborasen, que intercambiaran datos, utilizasen la misma tecnología,... En Europa cada uno va por su lado. Queremos estar en una posición de referencia y que todas las agencias europeas puedan utilizar nuestra tecnología, como lo hacen las de EE UU».

Además Ramírez sigue impartiendo clase en el Máster Interuniversitario de Incendios Forestales, que ha celebrado ya 12 ediciones y ha formado a «profesionales de primer nivel, que están trabajando por todo el mundo». Él imparte formación en materia de Tecnologías Aplicadas a Emergencias y también de Organización y Gestión de Emergencias.