LA ARQUITECTURA MODERNA LUCE PIZARRA LEONESA
DESARROLLO DE PRODUCTOS. Cupaclad, que combina sostenibilidad y diseño de vanguardia, ha sido elegido como el mejor producto para fachada en los premios anuales de la prestigiosa publicación estadounidense The Architect’s Newspaper
Instalación de Cupaclad. DL
La pizarra natural es uno de los materiales de construcción más demandados en la actualidad. La conjugación de calidad, elegancia, versatilidad y sostenibilidad son los motivos que explican la creciente popularidad, entre arquitectos internacionales, de un material que perdura a lo largo del tiempo y sobrevive a las modas.
En la arquitectura contemporánea, la pizarra se alza como un material capaz de adaptarse a proyectos de todo tipo, dotando a cualquier cubierta o fachada de un aspecto inimitable que se mantendrá inalterable con el paso del tiempo. Los análisis de ciclo de vida, que permiten analizar el impacto medioambiental de un producto a nivel global, confirman que se trata de una opción ecológica para revestir cubiertas y fachadas. Así, la alta durabilidad de este material, que ha demostrado una vida útil media de 100 años, incrementa automáticamente el valor de la construcción en la que se incorpore.
La sostenibilidad de esta opción empieza en el origen. La transformación de este recurso natural es artesanal y no requiere ningún tratamiento adicional, con lo que se reducen considerablemente las emisiones de CO2 a la atmósfera. En el proceso de fabricación se somete únicamente a los procesos de extracción y labrado.
A diferencia de los productos artificiales, la pizarra natural mantiene su color y propiedades intactas al paso del tiempo, otorgando a los edificios una personalidad única que perdurará para siempre. Estas cualidades estéticas sumadas a las excelentes características técnicas, como la durabilidad, explican la aparición ininterrumpida de esta roca en la historia de la arquitectura, desde las construcciones tradicionales hasta su irrupción en proyectos vanguardistas.
Con un volumen de exportaciones superior al 80%, España es el primer productor mundial de pizarra. Las reservas más importantes de este recurso se encuentran en la frontera de las provincias de León y Orense, en las comarcas de La Cabrera y Valdeorras. En este área es donde opera Cupa Pizarras, en 20 canteras y 24 plantas procesadoras equipadas con la más moderna tecnología.
Estética y sostenibilidad
Con una apuesta decidida por la calidad, la compañía se ha ganado la confianza de miles de arquitectos, colocadores y clientes, posicionándose como líder mundial del mercado, en el que comercializan una de cada dos pizarras instaladas en el mundo.
La textura y la elegancia que caracterizan a la pizarra aportan un toque único y personalizado a la fachada de cualquier vivienda. Pero, además, si su atributo estético se combina con la eficiencia energética del sistema de fachada ventilada Cupaclad, el resultado es una solución sostenible de alto valor añadido.
Cupa Innovación, el departamento de I+D+i de la multinacional de origen berciano, es el equipo que se encuentra detrás del desarrollo de uno de los sistemas constructivos más eficientes para el cerramiento de edificios que existe en la actualidad. Con sede en Vigo, Cupa Innovación nace en el año 2006 con el objetivo de sumar los esfuerzos en innovación de las distintas empresas de Cupa Group y desarrollar nuevas aplicaciones de pizarra como Cupaclad.
Además de su diseño moderno y amplia durabilidad, el punto diferencial del sistema Cupaclad lo marca la eficiencia energética. Frente a las fachadas tradicionales, que en muchas ocasiones carecen de un correcto aislamiento, la fachada ventilada es considerada el sistema más eficaz para el cerramiento de edificaciones.
El sistema Cupaclad está formado por un muro soporte, una capa aislante y un revestimiento de pizarra que se fija al edificio con una estructura portante. Gracias a esta estructura, entre el muro y el material de revestimiento, se crea una cámara de aire, no estanca, que permite la ventilación.
Las fluctuaciones naturales de las temperaturas producen en este espacio intermedio el fenómeno conocido como «efecto chimenea», que explica el excelente aislamiento de las viviendas que incorporan esta solución. En verano, el aire caliente sube y la cámara de aire se renueva con aire más frío. Mientras que, en invierno, el aire no se calienta lo suficiente como para ascender, por lo que el aire de la cámara no se renueva y la capa de aislamiento retiene el calor que proviene del interior. Esto evita el sobrecalentamiento en los meses de más calor y hace que la temperatura interior de la vivienda se conserve mejor en los meses más fríos.
La lista de beneficios de este tipo de fachada no termina en su eficiencia energética. Otras de las ventajas asociadas a la ventilación continua son la protección y eliminación de las filtraciones de agua, la prevención de grietas y fisuras, por cambios bruscos de temperatura, y la mejora del aislamiento térmico y acústico.
La resistencia es otro de los valores diferenciales de Cupaclad. Al contar con un revestimiento en pizarra, material clasificado A1 —el nivel más alto de resistencia al fuego según la normativa europea EN 12501-1— Cupaclad demuestra ser una construcción segura. Y no solo es ignífugo, sino que también está diseñado para resistir movimientos estructurales del edificio, evitando la caída y rotura de sus componentes.