La hora del metabar
CREACIÓN. El Metabar, la barra inteligente para acabar con las colas para pedir bebidas en festivales y conciertos. El proyecto ha sido uno de los finalistas en la última edición del SpinUOC, programa de emprendimiento de la Universidad Oberta de Catalunya. Sus creadores son clientes de festivales
Fastfest, empresa emergente impulsada por Arnau Camps, estudiante del máster universitario de Innovación y Transformación Digital de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), ha presentado en la última edición del programa de emprendimiento SpinUOC El Metabar, una máquina dosificadora de bebidas de autoservicio y de alta capacidad destinada a optimizar los procesos de compra en barras de grandes eventos. Se trata de un proyecto ambicioso que busca agilizar la venta de bebidas en festivales y conciertos. El mercado de la música en directo está en auge y tiene perspectivas de crecimiento, de forma que los promotores de El Metabar creen que hay futuro.
El origen del proyecto no se entiende si no se tiene en cuenta que sus creadores han sido y son clientes de festivales y conciertos, y para ellos siempre habían sido incomprensibles los largos ratos de espera para adquirir consumiciones en la barra. «Y todavía más cuando nos dimos cuenta de que la barra, o el servicio de barra, es el principal motor de generación de ingresos en estos acontecimientos», explica Arnau Camps. Además, los tres socios del proyecto han sido camareros, por lo que también conocen perfectamente la problemática que hay detrás la barra. Por lo tanto, tienen ambas perspectivas.
Los promotores del proyecto han hecho un estudio de mercado consistente en entrevistas destinadas a conocer el punto de vista de los organizadores de festivales y conciertos sobre estos problemas. Asimismo, hicieron encuestas a asistentes para recoger sus opiniones y saber qué valoraban más a la hora de pedir en una barra y qué dificultades se habían encontrado en los festivales y conciertos a los que habían asistido. También se les preguntó sobre sus preferencias de consumo.
Este estudio preliminar les ha permitido llegar a algunas conclusiones. Los organizadores son conscientes de los problemas e intentan solucionarlos, pero «con métodos poco eficientes, como recurrir a una doble barra, en la que unos camareros únicamente sirven las cervezas y las colocan en una mesa, y otros solo cobran y dan al cliente la cerveza previamente servida, lo que implica una pérdida de calidad del producto y la contratación de más personal», explica Camps. La propuesta de Camps y sus socios fue vista con buenos ojos.
En cuanto a los asistentes, un 99 % de los encuestados admitían haber tenido problemas con los servicios de barra, como colas largas o errores en la tramitación de los pedidos. «La rapidez era el factor al que daban más importancia a la hora de pedir en una barra, muy por encima de otros factores como el trato humano o la personalización», comenta Camps. La cerveza es la bebida más consumida en estos eventos y representa entre un 55 % y un 80 % de las consumiciones totales, según la encuesta. Los datos se han extraído también de informes de preferencias de consumo que elaboran empresas de sistemas sin efectivo con pulseras NFC.
El proyecto de Fastfest tiene como referentes algunas experiencias del Reino Unido, donde hay dos empresas que también robotizan la dispensación de cerveza. «En Fastfest utilizamos un sistema en la nube para supervisar en tiempo real las ventas y las necesidades de existencias, predecir la demanda de los consumidores o alertar sobre el recambio de un barril», apunta Camps. También tienen algunas funcionalidades que les ayudan «a hacer mucho más eficientes algunos de los procesos internos de Fastfest, como la configuración de todos los puntos de venta (precios, logotipos, capacidades, etc.), que podemos hacer en remoto, o bien el aviso directo al servicio técnico cuando surge una avería.
Los promotores del proyecto han hecho un estudio de mercado consistente en entrevistas destinadas a conocer el punto de vista de los organizadores de festivales y conciertos sobre estos problemas. Asimismo, hicieron encuestas a asistentes para recoger sus opiniones y saber qué valoraban más a la hora de pedir en una barra y qué dificultades se habían encontrado en los festivales y conciertos a los que habían asistido. También se les preguntó sobre sus preferencias de consumo.