Enchufados a la «corriente»
El rombo se enchufa a las «Zero Emisiones» con el Fluence y Kangoo. Motor eléctrico y dos carrocerías. En clave de realidad asequible para la generalidad de usuarios. La berlina Fluence y el comercial Kangoo, cabezas de puente en la ofensiva que propone Renault para la «electrificación» automovilística en los próximos años
Revolución sostenible. «Vender coches sostenibles para todos». No le duelen prendas a Armando Gracía Otero con una declaración de intenciones que, para el máximo responsable comercial del rombo en España, se perfila como una de las más revolucionarias actuaciones -por propuesta tecnológica- que marcará los próximos años en la trayectoria de la marca.
A la espera del pucelano Twizy, biplaza a medio camino entre moto y coche que se fabricará en Valladolid y que tendrá su puesta de largo la próxima primavera, unos más convencionales —sólo en el envoltorio— Fluence y Kangoo, rompen el fuego de lo que el fabricante anuncia como «un compromiso hecho realidad». Lo que no significa, en modo alguno, que Renault deje de innovar y optimizar sus catálogos de modelos convencionales, animados por mecánicas térmicas de combustión interna.
El fabricante galo, de histórica implantación en el mercado español, pretende romper moldes, y desterrar leyendas urbanas, con el lanzamiento de dos modelos para utilización real: estética «reconocible», conducción prácticamente «igual» a la de un coche convencional y hasta 185 kilómetros de autonomía y precio asequible (alrededor de 20.000 euros, a partir de 14.000 para el «profesional» Kangoo).
El vehículo eléctrico se convierte en portaestandarte de la política medioambiental de Renault eco2, basada en una oferta de productos y servicios más ecológicos y asequibles para todos.
Con un plan estratégico que el fabricante bautiza «Renault 2016-Drive the Change», el grupo automovilístico galo se compromete a reducir un 10% la huella de carbono en el mundo, de aquí a 2013, y un 10% adicional entre 2013 y 2016, mediante dos acciones: adopción de nuevas tecnologías en las motorizaciones térmicas y en las transmisiones (cajas de cambio) y un elevado compromiso con los vehículos totalmente eléctricos.
Según las previsiones del fabricante, de aquí a 2020, los vehículos «cien por cien» eléctricos representarán un 10% del mercado mundial; de forma que el objetivo de la Alianza Renault-Nissan es el de convertirse en actor principal de esta nueva fórmula de movilidad automotriz con millón y medio de vehículos movidos por electricidad de aquí a 2016: 4.000 millones de euros en inversión «Z. E.» (Zero Emisiones) y 2.000 personas (mil a mil Renault-Nissan) trabajan en los diferentes proyectos de vehículos eléctricos firmados la Alianza franco-nipona.