Diario de León

Herencia «ártica»

El color blanco Polar y la huella del Yeti personalizan el off road. Jeep lanza una serie limitada «Arctic» para su iconográfico Wrangler. Toda una declaración de intenciones, que «amplía fronteras» y mantiene vivo el puro -y duro- espíritu del modelo. Su tarifa arranca en 35.103 euros.

La versión «Arctic» del Wrangler combina efectividad y exclusividad.

La versión «Arctic» del Wrangler combina efectividad y exclusividad.

Publicado por
J. F. ZARDÓN
León

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Tras las huellas… del Yeti. El evolucionado icono de Jeep, recibe en sus catálogos una lujosa versión «Arctic» que, lejos de perder un ápice de las aptitudes off road que han venido caracterizando des siempre al Wrangler, las potencian más si cabe: sistema Command-Trac, suspensiones «así» de resistentes —eje rígido… como debe ser en la pura y dura filosofía de Jeep—, capaces de absorber cualquier irregularidad y escalar y descender hasta donde el cuerpo aguante; amén de la incorporación de los también famosos ejes «DANA», de generoso tamaño y que garantizan un excelente guiado del vehículo.

Eso sí, como lo cortés, no quita… ésta reinterpretación «Arctic» del Wrangler, tampoco tiene empacho en ofrecer un interior digno de las más pijas realizaciones supuestamente utilizables fuera del asfalto —casi nunca lo harán sus usuarios— tan en boga últimamente, sólo que aquí… sí que puede ensuciarse el Wrangler sin temor a represalias: profusión de cuero, asientos de diseño exclusivo, costuras «francesas» en color Naranja Ártico o inserciones en Blanco Polar en algunas piezas del salpicadero y en los relojes del cuadro de instrumentos, acaban por determinar la personalidad de un modelo «versionado» que mantiene la posibilidad de elección entre carrocería de dos o cuatro puertas.

Mientras, en el exterior, el Wrangler «Arctic»… rompe con la pana: un logo de factura exclusiva para la versión más gélida del Wrangler, protagonizado por la figura de un Yeti asomado sobre la palabra «arctic» y, bajo ésta, las coordenadas del Polo Norte dejan poco margen a la interpretación; así que, las nieve y el hielo acaban por convertirse en el hábitat natural de este particular Wrangler.

Un par de colores exclusivos para este serie especial: el Blanco Polar y el Gris Plata, vienen a resaltar las potentes líneas que siempre han caracterizado al Wrangler y que se complementan con el techo duro «Freedom Top», pintado en el mismo color de la carrocería, las llantas de aleación de 17 pulgadas, en negro, y otros detalles exteriores como la tapadera del depósito «Mopar», también en negro, el indicativo «Arctic» en los laterales de la carrocería y la guinda… las huellas del Yeti marcadas sobre el capó y la aleta delantera.

En el equipamiento tampoco faltan delicatessen como asientos y retrovisores exteriores calefactados, un sofisticado sistema multimedia, con Bluetooth integrado para telefonía y reproducción de archivos de audio o el retrovisor interior fotosensible.

En el capítulo mecánico, la versión «Arctic» del Wrangler sigue confiadno en el potente tretracilíndrico turbodiésel de rampa común 2.8 CRD de 200 CV y 46,9 metros/kilo de par a partir de sólo 1.600 vueltas, con la posibilidad de elegir entre una caja de cambios manual de 6 velocidades o la automática secuencial de 5 marchas.

Por lo demás, también se montan las habituales ayudas electrónicas a la conducción: frenos con ABS y ayuda a la frenada de emergencia BAS; también el sistema HSA de ayuda al arranque en pendiente y el control de estabilidad y tracción ESC.

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