audi a3 sedán
Deportividad combinada
En clave de coupé… ¿replicante?. La tercera generación del A3 tendrá, después del verano y desde unos previsibles 27.000 euros, una variante Sedán cuya gama contará también con una versión S3 de 300 CV.
La versión S3 adopta un potenciado motor de 300 CV.
Posiblemente no tenga nada que ver… aunque tampoco se descarta.
Audi «podría» dar la réplica al CLA de Mercedes con el A3 Sedán, sobre todo con la versión «S» de este nuevo cuatro aros que llegará al mercado español después del verano.
Equiparable en longitud (4,46 metros) a sus primos-hermanos Toledo (Seat) y Rapid (Skoda), este nuevo A3 Sedán aumenta en 15 centímetros la cota del reciente Sportback, a la vez que también gana una decena -larga- de centímetros en anchura (1,80 metros) y homologa 425 litros de capacidad de maletero (380 tiene el Sportback, con lo que el canibalismo... está servido).
Con una decidida apuesta por el diseño perfilado, esta tercera entrega de la gama A3 —tras las arquitecturas de tres y cinco puertas— se sitúa a medio camino entre un tres cuerpos —maletero separado, ya saben— y un auténtico coupé, de forma que goza una acusada personalidad propia por, como fácilmente puede suponerse, la descendente línea de techo hacia la zaga y el discreto alerón que remate la tapa del maletero.
El interiorismo calca el espíritu —y «ambiente»— de la generalidad de la gama A3, en lo que concierne a calidad de materiales y desarrollo ergonómico de un habitáculo confortable y bien terminado.
Con, además, la posibilidad de contar con elementos tan innovadores como el control de crucero por radar y con control de distancia.
Tres serán las mecánicas propuestas por Audi para el A3 Sedán; todas ellas con inyección directa, turboalimentadas y con sistema «Start&Stop» de arranque/parada automática del motor en detenciones prolongadas.
La oferta diésel viene dada por el conocido 2.0 TDI de 140 CV, que homologa 4,2 litros de consuno medio.
En gasolina podrá elegirse entre dos tetracilíndricos sobradamente conocidos: el 1.4 TSI de 140 CV, dotado de tecnología COD que desconecta puntualmente dos de los cuatro cilindros, y el 1.8 TSI de 180 CV.
También tres posibilidades de transmisiones: manual de 6 marchas y dos S-Tronic de 6 y 7 velocidades. Bien sea de serie o en opción, según acabados, se dispondrá del «Audi Drive Select», con programa Efficiency, además de otros elementos de ayuda a la conducción: alerta de cambio involuntario de carril, control de velocidad adaptativo, lector de señales de tráfico, advertencia y frenado automático anticolisión en ciudad y un innovador sistema de conectividad a Internet, con wi-fi, con capacidad para compartirse a la vez por varios ocupantes del coche.
La auténtica novedad motorística del A3 Sedán vendrá —antes de final de año— con el gasolina 2.0 TFSI de… ¡300 CV!, dotado con la nueva inyección variable, tracción a las cuatro ruedas y unas contundentes cartas de presentación: 4,9 segundos en aceleración de cero a cien y 250 por hora de autolimitada punta. ¡Ahí queda eso!.
«Eso»... y una altura de chasis rebajada en 25 milímetros, con la posibilidad añadida de elegir entre diversos tipos de tarado de suspensión. El más firme en los acabados Ambition y S-Line; opcionalmente pueden montarse llantas de 19 pulgadas.