Combinación versátil
Motor turbodiesel, con arquitectura «boxer», y tracción total . Pocos como Subaru mantienen sus convicciones: motor «boxer» (cilindros planos y opuestos) y tracción total permanente a las cuatro ruedas. Combinación que el fabricante nipón continúa trasladando al actualizado Outback, cuya tarifa arranca en 33.700 euros.
Buenos acabados interiores y sistemas multimedia.
Cuarta generación. La incorporación más significativa de la actualizada gama Outback, la declina Subaru en la adopción de un cambio automático de variador continuo «Lineartronic» de 7 marchas (con levas en el volante), que viene a unirse al inevitable motor boxer (cilindros planos y opuestos) y, ¡por descontado!, a la tracción total permanente que se ha venido convirtiéndose en el santo y seña del fabricante.
Una combinación, en clave de cóctel, que Subaru adereza con unas excelentes maneras dinámicas que, lejos de poner en apuros al conductor, le permiten comportarse como si toda la vida hubiese estado al volante de un Outback: escalonamiento perfecto y un reforzado convertidor de par de permite administrar sin problemas el generoso par (35,7 metros/kilo) del que se dispone.
Consecuencia: elasticidad asegurada, lo que, como fácilmente puede suponerse, permitirá aventurarse, con autoridad, fuera del asfalto.
La distribución del par de tracción, se distribuye en el Outback —casi— mitad/mitad (45/55), corrigiéndola mediante un diferencial LSD controlado electrónicamente.
También los tarados de suspensión, ahora más firmes, minimizan el balanceo de un conjunto cuya romana oscila entre los 1.533 kilos de la versión de gasolina y los 1.624 del modelo diésel.
Eso, por no hablar de los 526 litros de capacidad del maletero, sus cinco habitables plazas y una distancia libre al suelo de una veintena de centímetros.
La puesta al día estética del renovado Outback viene dada por unos paragolpes de nueva factura, las también nuevas llantas y las ópticas frontales, además de hasta ocho tonalidades en la pintura de la carrocería.
En el interior, los cambios son de detalle: un nuevo freno eléctrico de estacionamiento, amén de un renovado equipo multimedia.
En suma, que Subaru continúa apostando por un modelo, el Outback, que juega sus mejores bazas en la fiabilidad todoterreno para quienes pretendan un vehículo versátil y sin complicaciones dinámico-prácticas.