El futuro… según Opel
Optimización del espacio, construcción ligera, mecánicas innovadoras. Opel «revive» el Monza. Aquel ampuloso coupé, de generosas dimensiones y vanguardistas aplicaciones, que ahora vuelve a tener su «alter ego» en un prototipo de concepto que marcará las pautas tecnológicas de la marca en los próximos años.
Visionario. Hace más de tres décadas, aquel otro Monza también montaba una avanzada pantalla digital en su vanguardista cuadro de instrumentos; ahora, el nuevo Concepto Monza vuelve por sus fueros… «estilizada y ultra moderna tecnología sobre cuatro ruedas», como lo definen sus creadores; el modelo a imitar para la próxima generación de coches Opel.
Con estos mimbres, y sin que les duelan prendas a los responsables de la rama europea de General Motors a la hora de calificar a su nueva criatura, que estos días pisa la moqueta del Salón de Francfort, el Concepto Monza, que muy bien podría recuperar su histórica denominación para un futuro gran coupé sobre la base del Insignia, se presenta en sociedad luciendo unas espléndidas «alas de gaviota» -¡mira que les gusta a los germanos la tal solución!- que, aunque finalmente no lleguen a la serie -o sí… quién sabe-, sí que viene a demostrar una suerte de regreso al futuro -aunque el primigenio Monza no las llevase- en los futuristas planes productivos de la marca.
Sea como fuere, con «alas» o sin ellas, lo que sí que pasará a la cadena de montaje será un cuadro de instrumentos con las imágenes proyectadas en 3D: una veintena de leds (18, para ser exactos) acaban por crear una innovadora pantalla multifuncional, configurable y con mando táctil o vocal, que simplificará las informaciones que reciba el conductor en cada momento. Incluso Opel ha desarrollado un sistema de conectividad capaz de poner en contacto -mediante smartphone- al coche con su conductor, los demás ocupantes del vehículo y hasta con persones externas al propio coche.
El Monza del XXI, que mide 4,69 metros de largo; 1,31 de alto y 500 litros de capacidad de maletero, adopta un espectacular diseño modular de construcción ligera, con un diseño lateral que facilita el acceso de los pasajeros a las plazas traseras, a la vez que se optimiza la utilización del espacio interior.
También se adopta una avanzada tecnología de propulsión, la llamada técnica de autonomía extendida, ya vista en el Ampera: propulsión eléctrica con un entendedor de autonomía GNC (Gas Natural Comprimido) combinada con un motor tricilíndrico 1.0 Turbo SIDI de nueva generación, alimentado por gas natural en lugar de gasolina, con lo que se mejorará el impacto de las emisiones de CO2.
En fin, que para el Dr. Karl-Thomas Neumann (Presidente de Opel)… «tenemos una visión clara de cómo han de ser los Opel del futuro, y también tenemos una estrategia clara de cómo afrontar el reto»… El Concepto Monza, «clarifica» así esta estrategia de identidad de marca.