Abarth 695 biposto. «Adrenalítico»...
Carlo Abarth (fundador de “Officine Abarth”) “Los domingos en el circuito. y los lunes en la oficina”. La «traducción» del racing en un coche para todos los días. En el quincuagésimo aniversario del legendario Fiat Abarth 695, el «prepardor» le rinde homenaje con el nuevo 695 biposto. Un «minimalista» superdeportivo que pone a pie de calle lo mejor de la tecnología de los coches de carreras.
Artesanía… cuidado por los detalles. La típica filosofía del «Escorpión» elevada a la máxima expresión... firmada por la turinesa «Officine Abarth» .
Con una abultada cartera de pedidos, que comenzará a entregarse a finales de año, el Abarth 695 biposto combina como pocos la máxima del fundador Carlo: «Los domingos en el circuito y los lunes en la oficina»; puro ejemplo conceptual de las realizaciones «competición-cliente», que han hecho célebres las transformaciones del «Escorpión» desde hace cinco décadas.
Disfrutar a diario de la propia pasión. Así dicho, podría parecer imposible... sólo que Abarth ha querido desafiarse a sí misma, a la búsqueda del equilibrio perfecto para poner en carretera un coche que, cumpliendo con la normativa y la seguridad en la conducción, garantizase idéntica emoción que el 695 Assetto Corse utilizado en los circuitos por los participantes en el Trofeo Abarth y en los monoplazas de Fórmula 4 con, eso también, unas «escandalosas» credenciales: tetracilíndrico multiválvulas 1.4 T-Jet de 190 CV, la mecánica más potente jamás instalada en un Abarth de carretera, cuya potencia específica se cifra en 139 CV/litro —récord en su categoría—; 997 kilos, una romana que propicia 5,2 Kg/CV; 5,9 segundos para sprintar de cero a cien... y 230 por hora de punta.
Así las cosas, la única forma de garantizar que se cumplan estos ambiciosos objetivos es utilizar componentes y tecnologías heredadas del mundo de la competición, aplicándolos a un vehículo de calle: un noble «ADN», fruto de la experiencia atesorada en los circuitos de todo el mundo y cuya ficha técnica puede presumir de unas no menos nobles adopciones: intercooler frontal potenciado, kit de aspiración BMC de altas prestaciones, escape «Abarth by Akrapovic» con válvula activa —musicalidad asegurada—, amortiguadores regulables «Extreme Shox», frenos Brembo, llantas ultraligeras OZ de 18 pulgadas y barra antivuelco de titanio firmada Poggipolini.
Para que nada falte, a imagen y semejanza de los coches de carreras en aras de la reducción de peso, la sencillez racing preside un habitáculo extremadamente ergonómico: asientos bacquet «Abarth Corsa by Sabelt» con respaldo en composite, instrumentos con pantalla de 7 pulgadas TFT en color y los «flan panel» , los típicos panelas de puertas planos para destacar el carácter del 695 biposto; incluso las habituales alfombrillas dejan paso a un revestimiento de aluminio, el mismo material utilizado en los pedales y en los reposapiés de piloto y copiloto ; por no hablar de la timonería del cambio en aleación ligera, «a la vista» y con el clásico selector en «H».
Las dos «jorobas» del capó, inspiración 124 Abarth, y las ventanillas delanteras fijas con paneles corredizos «Lexan», acaban por demostrar que no existen límites al ingenio... ni a la pasión.