Land Rover. Regreso… a la historia
Un homenaje al pionero «Series I». La planta británica de Solihull inaugura un «recorrido homenaje» a uno de los vehículos más emblemáticos del mundo. La réplica de la cadena de montaje original de 1948, resulta ser un atractivo aliciente para el visitante.
Land Rover recrea, en la factoría de Solihull, la producción «Series I» de 1948.
Recreando la historia. Land Rover revive parte de su dilatada historia «construyendo» una réplica —auténtica— de la cadena de montaje utilizada, en 1948, para la fabricación de su primer 4x4. La réplica «Defender Production Line» recrea minuciosamente cómo se construía, hace casi setenta años, el primer «Series I» de Land Rover en la planta de Solihull justo después de la II Guerra Mundial.
Las réplicas de los modelos originales, en sus diversas fases productivas, han sido meticulosamente construidas y ensambladas utilizando piezas y procesos idénticos a los de la fabricación original del año 48; reflejando, eso también, cómo era la vida en una cadena de montaje a finales de los cuarenta… del siglo pasado: herramientas originales, mesas de dibujo de los diseñadores y hasta «vestir» —podrán hacerlo los visitantes— las prendas de trabajo de la época, conocidas como «cow gown» ; una tracción que también incluye una sección en la que el mismísimo Maurice Wilks, fundador de Land Rover, narra —virtualmente— el proceso de creación del «Series II», deleitando a los visitantes con imágenes de vídeo inéditas cedidas por la familia.
Para esta sugestiva «creación&recreación» de los vehículos que integran la muestra, la firma ha contado con la colaboración de Phil Bashall, uno de los mayores entusiastas internacionales —y restauradores— de modelos Land Rover y, en la actualidad, al frente de la prestigiosa «Colección Dunsfold» de vehículos históricos Land Rover. Con sólo 13 años, el propio Phil construyó su primer «Series I», y no ha podido evitar sorprenderse al saber que la compañía tenía previsto construir una línea de montaje idéntica a la de 1948.
«En ocasiones —manifiesta Phil— ha resultado muy duro conseguir todas las piezas originales necesarias para fabricar unos vehículos que dejaron de producirse hace tantos años, aunque también ha sido una misión sumamente emocionante».
Phil, que ha conseguido atesorar más de ocho mil piezas originales de Land Rover a lo largo de los años, guardaba en su particular «Cueva de Aladino» cantidad de las piezas necesarias para la recreación ; aunque, encontrar —y reunir— «todos» los frenos, embragues, juntas y pedales… supuso una búsqueda exhaustiva.
Tres horas dura éste «tour histórico» en la fábrica del Defender, donde trabajan actualmente 450 empleados, y pueden verse, además de los procesos productivos que se utilizaban en 1948, las exigentes pruebas en la «cámara de los monzones»: 343 chorros de agua a presión, durante 14 «eternos» minutos, para certificar que los vehículos… son totalmente estancos.
Para «Mister Land Rover» (Roger Crathorne, nacido en Solihull y que se inició allí como aprendiz en 1963), «ningún otro fabricante del mundo cuenta con un proyecto tan genuino y realizado con tanta minuciosidad… ha merecido la pena».