Skoda. 120 ‘historias’… de pasión
De fabricante de bicicletas a constructor de automóviles. Los pioneros Laurin y Klement ‘iluminaron’ las bases de una de las compañías automovilísticas más antiguas del mundo. Más de 17 millones de coches L&K y Skoda avalan una apasionante trayectoria productiva.
Y también, lo que va de «ayer a hoy» en las carreras; de ‘aquel’ 130 RS en la década de los 70 al Fabia WRC actual… ¡un mundo!.
Doce décadas… ‘diecisiete millonarias’. Skoda celebra el último mes de 2015 su 120 aniversario; sus orígenes se remontan a los primeros compases de la automoción mundial y a la capacidad artesanal de la industria checa..
En ‘aquel’ diciembre de 1895, Václav Laurin y Václav Klement sentaron las bases de esta historia en Mladá Boleslav, el pequeño taller de las bicicletas «Slavia», que acabaría convirtiéndose en la compañía L&K y expandiendo su negocio a la producción de motocicletas y, de ahí, en 1905, al primer automóvil (7 CV y 40 Km/h.).
Tanto crecería la gama automovilística L&K, que sólo un par de años más tarde, la marca se convertía, con nueve modelos en catálogo, en el mayor fabricante de coches en la antigua monarquía austro-húngara: desde los pequeños bicilíndricos y los tetracilindrícos de carreras hasta las furgonetas y autobuses.
La Gran Guerra, su postguerra y la crisis de los años 20, afectarían tanto a L&K, que la marca acabaría fusionándose con Skoda (Pilsen, 1925), entonces la mayor compañía de la República Checa; unión que supondría el relanzamiento de la producción automovilística en Mladá Boleslav, de donde saldrían, en la década de los 30, algunos legendarios modelos como el Skoda 640 Superb de 6 cilindros, que marcó la trayectoria de la marca… hasta el ‘segundo parón’ , el de la II Guerra Mundial.
Nacionalizada tras la guerra, incluso bajo las difíciles condiciones de la economía socialista, Skoda lanzaría un buen número de modelos en la década de los 40: 1101 «Tudor», 440 «Spartak», el legendario Roadster Felicia y, un par de décadas más tarde, otro ‘hito’: el Skoda 1000 MB de 1964, primer chasis autoportante de la marca, con motor (de aluminio) y propulsión trasera.
En 1987, el Favorit se convertiría en el primer compacto de Skoda con tracción delantera, firmado por el estudio italiano de Bertone, que supuso toda una «revolución» —otra más…— en un país del «Bloque del Este»; escasamente dos años más tarde… la economía socialista se vino abajo.
Tras la «Revolución de Terciopelo» (1989), Skoda necesitaba un socio estratégicamente fuerte: en 1991entra en la órbita del Grupo Volkswagen, sextuplicando sus ventas entre 1991 y 2014 (más de un millón de unidades ese año 14) y pasando de ser un fabricante de «solamente un modelo» a contar con una gama con alrededor de 40 modelos/versiones distintas.
Además de contar con tres plantas productivas en la República Checa, Skoda produce actualmente en China, Rusia e India.