Ateca X-Perience. Aventurero…
Seat desvela el nuevo SUV ‘vestido de campo’. Versatilidad, tecnología y diseño. Mayor altura libre al suelo, llantas de 18 pulgadas y neumáticos con dibujo ‘off road’. Recién salido del horno, el nuevo Ateca demuestra ya nuevas posibilidades dinámicas.
Múltiples… cualidades. Ya se sabe —también Seat— que la inmensa mayoría de los potenciales usuarios del primer SUV propuesto por Seat, el Ateca, no pisarán barro en toda la vida útil de su coche; lo que ‘no quita’ para que, también se sabe, que un pequeño porcentaje (la marca lo cifra en el 5%) sí que gustarían de poder aventurarse algo más… fuera del asfalto.
Para ellos… ahí va la versión X-Perience: tracción total (sistema Haldex de quinta generación), generosa altura libre al suelo y un no menos generoso equipo de rodaje (llantas de 18 pulgadas y neumáticos con dibujo ‘off road’ ).
Eso, por no hablar del mando giratorio «Driving Experience» en la consola central desde el que el conductor puede gestionar varios modos de utilización: Normal, Sport, Eco, Individual, Nieve y Offroad, junto con el control de descenso en pendientes («Hill Descent Control»).
Todo ello, eso también, trufado en estética campera : color verde oliva mate («Olive Green Matt») combinado con tonos naranja en elementos como las carcasas de los retrovisores exteriores y en una fina línea rematando la base de la boca frontal de refrigeración.
Los raíles cromados del techo, un spoiler en la parte alta del portón trasero, marcados estribos laterales, cubrecárter delantero y protección zaguera en los bajos de caja, marcados pasos de rueda…
En el interior, además de la iluminación ambiental tipo led, los estilistas de Seat han utilizado tonalidades inspiradas en la naturaleza y relacionadas con los colores exteriores: «tierra», «café» y «verde»; a la vez que se adoptan detalles en hilo color naranja en el volante (con las siglas «XP»), en los asientos (tapizados en ante) y en el pomo de la palanca de cambios. Como en el León X-Perience, al abrir el portón se aprecia una banda cromada en el plano de carga.
El Ateca X-Perience viene animado por el tetracilíndrico turbodiésel de rampa común 2.0 TDI de 190 CV, unido al cambio automático secuencial DSG de 7 velocidades con levas en el volante.
Por lo demás, esta versión campera del Ateca monta todos los sistemas de seguridad y asistencia a la conducción con los que ya cuenta su hermano de asfalto (cambio involuntario de carril, control de crucero adaptativo, frenado de emergencia con reconocimiento de vehículos y peatones, alerta de tráfico posterior, cámara de 360º con visión cenital, asistencia de estacionamiento en línea o en batería…) además, lógicamente, de los elementos de conectividad de última generación.
En suma, que Seat da un paso más en su propuesta SUV todocamino, ahora… en toda la extensión de la palabra.