Volante a la carta…

«Hola, soy Sayer, el volante del fututo» … según Jaguar.

Podrá guardarse en casa, tendrá inteligencia artificial, activación de voz y está ‘capacitado’ para realizar cientos de tareas. Miren por donde, como las matrículas inglesas, ‘Sayer’ será la única parte del coche propiedad exclusiva del conductor.

Y no sólo —lo que no es poco—, porque solamente hay que comunicarle nuestra agenda para que ‘Sayer’ se encargue de despertarnos —¿un ‘codazo’ ?... esperemos que no—, tener dispuesto el coche a la puerta de casa y —¿además?— indicarnos las partes del recorrido en las que más se disfrutará conduciendo… ¡menos mal!

Nada, hombre, que soñar es gratis… o casi; porque ‘nuestro’ volante está imaginado —por imaginación que no quede— para un futuro —¡Uf¡— de vehículos autónomos, conectados y eléctricos, ‘cuando’ no se compren coches individuales, sino que el cliente solicite el que desea (¡E-Type… por favor!) en el momento y lugar que lo precise… ¡Ahí queda !

Menos mal —¡siempre nos quedará la historia!— que su nombre rinde culto a uno de los diseñadores más significativos en la histórica trayectoria de Jaguar: Malcolm Sayer, que trabajó para la marca entre 1951 y 1970.

¡Estamos salvados!... de momento.