Peugeot. Así se fabrica el coche del Dakar
El 3008 DKR Maxi hereda ‘taller’ del Mundial de Rallyes y las 24 Heures. Tres mecánicos, cuatro semanas, quinientas horas. Así ‘nace’ una unidad del coche que defiende los colores del León de Montbeliard en la prueba más exigente del mundo del motor.
Un chasis tubular… desnudo. Así comienza un proceso que finalizará con la puesta en marcha del motor y las pertinentes comprobaciones rutinarias en los talleres de Peugeot Sport. Aunque, antes…
Diseñar y construir un coche para conquistar el Dakar… no es tarea precisamente fácil. Buena prueba de ello es que muchos fabricantes —la mayoría— recurren a preparadores externos para que desarrollen y hagan competir un coche con los colores de la marca. No es el caso…
Vélizy, a las afueras de París, las instalaciones de Peugeot Sport bullen en los talleres que han gestado allí los prototipos de Le Mans y los coches del Mundial de Rallyes… y del Dakar.
Un denominador común: dominar cada una de las especialidades.
No en vano, Peugeot ganó la primera carrera de coches de la historia, en 1895: el Type 7 venció en el Rallye París-Burdeos.
¿Y el sueño del Dakar? Pues… siempre ha tenido un significado especial para la marca, antes incluso de aquella primera participación fechada en 1987. «Quizá» —seguro— porque la legendaria fiabilidad de los productos de Montbeliard sedujo a participantes privados (1979) que corrieron el Dakar a bordo de seis Peugeot 504 y 404 prácticamente de serie.
Así que, el 3008 DKR Maxi, aspira a entrar en la leyenda junto a iconos como el 205 Turbo 16 y 405 Turbo 16.
El actual 3008 DKR Maxi resulta ser una evolución del coche que ganó la pasada edición de 2017 que, a su vez, derivaba también del concepto original inaugurado por el 2008 DKR, en cuya creación —la de los tres— el fabricante ha empleado sofisticadas herramientas de diseño CAD, generando un modelo informático de coche completo para, a medida que las diferentes piezas van conformando el vehículo, proceder a su fabricación «real».
Cada pieza se prueba por separado, a la vez que van encajándose las diferentes evoluciones en función de los cambios de reglamentación deportiva buscando, lógicamente, el mayor rendimiento dinámico y de fiabilidad.
Si el 3008 DKR Maxi bebe en las fuentes del 2008 DKR, su lógica evolución lo ha llevado a convertirse en coche muy diferente: chasis tubular de acero de alta resistencia, sobre el que montándose el ‘mecano’ que supone la fabricación de un buggy para el Dakar.
Un complejo proceso de unión con resinas y pegamentos específicos, permite ‘soldar’ la célula de seguridad al bastidor. Un bloque central al que se atornillarán los subchasis delantero y trasero —también tubulares de acero—, a la vez que se monta el enorme depósito de seguridad —400 litros— imprescindible para afrontar las maratonianas etapas del Dakar.
La instalación del sistema eléctrico y la arquitectura electrónica, conexiones y cableado incluido, es el siguiente paso para la construcción de un 3008 DKR Maxi que utiliza tres ‘cerebros’ electrónicos: el principal (recoge y procesa información de múltiples sensores en tiempo real) y el que distribuye la potencia eléctrica a cada componente y el que gestiona el motor.
Y de ahí… al motor: un diésel V6 Biturbo. Primero se instala el bloque, sobre el que van acoplándose los diferentes elementos periféricos (bombas, correas, manguitos, sensores…).
A renglón seguido, con el propulsor alojado en sus anclajes, se procede a trabajar en los trenes de rodaje: suspensiones de enorme recorrido para superar —casi— cualquier obstáculo —¡infinitos… en el Dakar!—, un capítulo en el que los técnicos han trabajado especialmente en esta ocasión, con la mirada puesta en ganar estabilidad ‘fuera pista’ : vías aumentadas en 20 centímetros y nueva cinemática de las suspensiones que se traduce en la modificación de los triángulo inferiores y superiores, como los grilletes y los árboles de transmisión. El montaje de los bujes, los frenos, las llantas y la dirección, abrochará esta etapa de construcción en la que, paralelamente, se habrá vestido también el habitáculo (baquets , arneses de seguridad, columna de dirección, pedalier , instrumentación…).
Justo antes de vestir el 3008 DKR Maxi con la carrocería de fibra de carbono, se arranca el motor… ya sólo falta dar un paseo alrededor del taller de Peugeot Sport… y subirlo al camión que lo transportará al lugar elegido para la realización de los primeros ensayos ‘de verdad’ : 18.000 kilómetros entre Marruecos, Portugal y Francia, antes de tomar la salida en la primera carrera oficial…