De París… al Dakar

(Peugeot 908 Le Mans)

Tras la ‘épica africana’ , «Peugeot Sport» volvió su mirada a los circuitos: Sport Prototipos y Resistencia, el biplaza 905, se alzó con el Mundial de la especialidad en 1992 logrando, además, un triplete en las 24 Horas de Le Mans el año siguiente.

El cambio de siglo traería el regreso al Mundial de Rallyes con el 206 WRC: 25 victorias en pruebas mundialistas, ‘salpimentadas’ con los títulos de Constructores (2000, 2001 y 2002) y Pilotos (2000 y 2002).

Y, para demostrar, las posibilidades de la tecnología diésel (HDi), Peugeot se propuso ‘otro’ reto: vencer en las 24 Heures . Años de trabajo que tuvieron recompensa: doblete del 908 HDi en 2009, acompañado de otras renombradas victorias en los 1.000 Km. de Spa y las 12 Horas de Sebring (2010 y 2011).

La Subida a Pikes Peak (Colorado EE.UU), una de las carreras más famosas del mundo, también está ‘anotada’ en el palmarés de Peugeot: Ari Vatanen venció en 1988 y Sébastien Loeb lograría imponerse en 2013 marcando el récord de la ascensión (208 T16 Pikes Peak).

(PGT Georges Boillot 1912 / G. P. de Francia)

Tanto fue así, que el primer coche —su motor— con árbol de levas en cabeza, pilotado por estrenó su palmarés imponiéndose en el Gran Premio de Francia en 1912 y 1913, con Georges Boillot al volante; a lo que hay que sumar la victoria de otro «Charlatán», Jules Goux, en el prestigioso Gran Premio de La Sarthe (1912). Precisamente Goux, ingeniero de Peugeot desde 1910, sería el responsable del prestigio internacional del L76: récord de velocidad de la media milla en el Circuito de Brooklands (1913) y victoria en la míticas 500 Millas de Indianápolis, iniciando así una era de dominio de Peugeot en el óvalo más famoso de los deportes del motor.

El estallido de la Gran Guerra supuso la llamada a filas de «Los Charlatanes», lo que tampoco interrumpiría la racha triunfal del L76, que repetiría victoria en Indianápolis —1916 y 1919—, con los pilotos americanos Dario Resta y Howdy Wilcox; incluso Resta se impondría también en la Copa Vanderbilt y en el Gran Premio de Estados Unidos de 1915.

(PGT 3008 DKR Maxi Dakar 2018)

Una experiencia que se convertiría en el mejor —y ambicioso— «preparativo» para el regreso al Dakar con la nueva gama SUV de Peugeot, reuniendo un auténtico ‘Dream Team’ Rallye-Raid: el español Carlos Sainz y los galos Stéphane Peterhansel, Sébastien Loeb y Ciryl Despres. El dominio sudamericano lo plasmó el León de Montbeliard’ con la victoria de Peterhansel (2016) y, al año siguiente, «el» histórico triplete: Peterhansel, Loeb y Despres. Para ‘redondear’ , en 2018… Carlos Sainz y ‘su’ segundo triunfo en el Dakar al volante del 3008 DKR Maxi.

Acicate… victorioso. París, 11 de junio de 1895. Expectación en los alrededores del Arco de Triunfo. Banderazo de salida para una carrera que acabaría pasando a los anales del automovilismo deportivo: París-Burdeos-París, prueba en la que, por primera vez en la historia, se medirían… los automóviles, un curioso ‘invento’ , relativamente reciente entonces; 1.178 kilómetros por caminos y ‘carreteras’ sin asfaltar. El piloto podía viajar con un mecánico porque, en caso de avería, solamente podrían resolverse los problemas «por sus propios medios», sin recurrir a ningún tipo de ayuda externa. Así comenzaba todo…

Sólo cinco años antes… Peugeot ‘arrancaba’ su andadura como constructor de automóviles: no sólo venció, con un Type 7 conducido por Paul Koelchin, también la marca ocupó tres de las cuatro primeras posiciones, además de utilizar los primeros neumáticos hinchables de la historia (con cámara de aire) desarrollados por Michelin.

Bien entrada la ‘Belle Époque’ , los ingenieros de Peugeot —«Los Brujos»— ya se habían labrado una excelente reputación preparando vehículos de carreras.

Sin embargo, tuvieron que soportar el insistente acoso de un grupo de pilotos ‘veinteañeros’ que proponían avances técnicos, y audaces diseños, en busca de mayores prestaciones. «Los Brujos» no creían demasiado en ‘aquellas’ aportaciones, les acabaron apodando «Los Charlatanes»… y así han pasado a la historia.

Con todo, las ideas de «Los Charlatanes» tampoco caerían en saco roto: Ernest Henry, un joven ingeniero suizo, se las tomó en serio… y acabó plasmándolas en el Peugeot L76 que, con sus diversos derivados, acabarían dominando los circuitos en la década de 1910.

(PGT Peugeot 208 Rallye Cross Hansen)

Después… el RallyeCross se ha convertido en el último gran reto de la marca —de «Peugeot Sport»—; primero conquistando el Mundial (2015) de la mano de la familia Hansen —que lleva esta especialidad en su ADN — y, tres años después, con el «Team Peugeot Total», que confirmaba su andadura en el WRX con la victoria de Loeb en Bélgica a bordo del 208 WRX.

Ahora… «Peugeot Sport» trabaja activamente en el desarrollo de una revolucionaria gama de vehículos deportivos electrificados, una excelente oportunidad de ayuda a la sostenibilidad del mundo del automóvil, consolidando —también— su ‘savoir-faire’ ante la nueva era que se asoma ‘al circuito’ de los deportes del motor…

Y todo comenzó… hace más de un siglo, en la París-Burdeos-París, con las 24 Heures du Mans , las 500 Millas de Indianápolis, el Rallye de Montecarlo y el Dakar… como telón de fondo. ¡Joyeux aniiversaire!

(PGT Peugeot 402 Darl´Mat Le Mans)

A partir de entonces… la «Red Comercial Peugeot» ha venido teniendo una importancia capital en el apoyo a la competición, patrocinando jóvenes pilotos y, además, preparando coches para su uso deportivo. En los años 30, en pleno centro de París, el concesionario Darl´Mat, atesoró una merecida reputación por la efectividad de sus transformaciones: el 402 Darl´Mat, tuvo destacadas actuaciones en las 24 Horas de Le Mans; la victoria del equipo De Cortanze-Cortet en categoría «2 Litros», abrió el camino a nuevas victorias de Peugeot… seis décadas después.

A partir de los años 60, con África como ‘terreno de juego’ , Peugeot hizo bandera de la fiabilidad, robustez y comportamiento en carretera de sus automóviles para competir en rallyes. El 404 rompió el fuego’ , apuntándose cinco victorias consecutivas en el East African Rallye entre 1963 y 1968.

A renglón seguido, en los 70, el 504 atesoraría un envidiable palmarés: dos victorias en el Rallye Bandama, en Marruecos 1975 y 1976 y las ediciones de 1978 de los Rallyes Safari y Costa de Marfil.

En 1981, el revulsivo: la creación de «Peugeot Talbot Sport», embrión del actual «Peugeot Sport», reforzaba la presencia de la marca en las carreras. Su primer director, ‘Napoleón’ Jean Todt, hizo valer las dotes organizativas y los conocimientos atesorados durante años como uno de los mejores —¿el mejor?— copiloto de rallyes para poner en pie una estructura ganadora. Su dilata experiencia lo convertiría —también— en uno de los directores de equipo más laureados en la historia de la F1: siete títulos de Constructores y Pilotos hasta llegar, en la actualidad, a la presidencia de la Federación Internacional del Automóvil (FIA).

(PGT Peugeot 205 T16)

El primer proyecto de «Peugeot Sport» se saldaría con el triunfo en el Mundial de Rallyes con un coche que ha entrado en la leyenda: 205 T16, vencedor en tres pruebas mundialistas en 1984 —año de su debut— además de conquistar dos veces el Mundial: 1985 con el Timo Salonen y en 1986 con Juka Kankkunen. Al año siguiente, la FIA suprimiría la homologación de los «Grupo B» en el Mundial de Rallyes; sin embargo, el 205 T16 ‘supo’ aumentar su leyenda en la prueba más dura del mundo del motor: el Dakar, donde se impondría en 1987 y 1988, dejando paso al 405 T16, dominador de la prueba en 1989 y 1990.