‘Aniversario’… estable
Si de aniversarios se trata, ‘puede’ —seguro— que estamos asistiendo a uno que, coincidente con la octava generación ‘neveonce’ , pase a los anales de la marca: «Porsche Wet», una primicia mundial que propicia un mejor comportamiento en carreteras mojadas. El sistema incluye una función para detectar si el asfalto está lo suficientemente húmedo y, en cuyo caso, adaptar los ajustes del coche para aumentar la estabilidad de marcha, obviando el riesgo de ‘aquaplaning’ .
Unos sensores acústicos situados en las aletas delanteras detectan si se genera ‘spray’ de agua en la zona. Esta es la gran diferencia con los sensores de lluvia para los limpiaparabrisas, que sólo reaccionan de forma óptica con las gotas que caen sobre el parabrisas, independientemente de las condiciones del asfalto (la calzada puede seguir mojada cuando ha cesado la lluvia); así que, los sistemas de estabilidad y control de tracción, actúan más rápida y sensiblemente. Incluso aparece una alerta en el cuadro de instrumentos —junto al cuentarrevoluciones—, que informa al conductor de la detección de humedad, «recomendándole» que cambie al modo «Wet», una función que se activa desde la nueva fila de botones ubicados en la consola central o, si se dispone del opcional paquete «Sport Chrono», también mediante el conmutador integrado en el volante: a partir de 90 por hora, se despliega el ‘spoiler’ trasero hasta la posición de «carga aerodinámica superior», se abren las aletas de refrigeración, el pedal del acelerador se vuelve más «plano» y no se permite la desconexión del control de estabilidad ni la activación del modo «Sport». También la entrega del par/motor se torna más suave, mientras «el mapa» de la caja de cambios PDK (8 velocidades) se adapta automáticamente a esa forma de funcionamiento. En el caso de la tracción integral (911 Carrera 4S), se transfiere más potencia de la habitual al eje delantero, reforzando así el efecto estabilizador del coche.
Consecuencia: el ‘nueveonce’ ofrece un comportamiento más «noble», a la vez que las «intervencones» de los sistemas de ayuda a la conducción se muestran especialmente efectivas en los cambios de dirección repentinos, en la solicitud de potencia inmediata o en los cambios de adherencia mojado/seco. El modo «Wet» puede activarse manualmente para aumentar la estabilidad del coche en carreteras con nieve o en superficies de agarre reducido.
El 6 cilindros ‘bóxer’ turboalimentado del nuevo 911 rinde 450 CV y ‘sprinta’ de cero a cien en 3,7 segundos (3,6 el Carrera 4S), lo que se traduce en una ganancia de 0,4 segundos con respecto a su antecesor.