VW e-Bulli. La ‘Hippy’… se enchufa
Un clásico alto de gama, eléctrico de alta tecnología
JAVIER FERNÁNDEZ
Del 66… al 20. La experiencia de la compañía ‘e-Classics’ propone una precisosista réplica de la icónica furgoneta ‘Hippy’ en un modelo totalmente eléctrico: una renovada plataforma con los componentes del sistema de propulsión eléctrica firmado por VW, y una reconocible estética basada en el T1 Samba Bus de 1966… restaurado a conciencia por VWCV ‘Vintage Vehicles’, socio de Volkswagen.
Como ‘aquellos’ viajes de los sesenta, esta aventura comenzó con la, aparentemente audaz, idea de transformar un histórico Bulli en un modelo con propulsión ‘limpia’, alineándolo así con los desafíos tecnológicos de la nueva era.
Así, los ingenieros y diseñadores de Volkswagen Vehículos Comerciales formaron equipo con los expertos en sistemas de propulsión de ‘Volkswagen Group Components’ y la compañía ‘e-Classic’, especializada en la conversión de vehículos de combustión en modelos eléctricos.
La elección, en este caso, el T1 Samba Bus producido en Hannover (1966), que antes de su ‘conversión’ ya había pasado medio siglo en las carreteras californianas.
Consecuencia: el tetracilíndrico ‘bóxer’ de 44 CV ha cedido plaza a un silencioso —¡lástima de rumorosidad ‘refrigerada por aire’!— motor eléctrico de 81 CV, con lo que el ‘enchufado’ e-Bulli se convierte en el T1 ‘Hippy’ más potente que nunca.
La propulsión trasera —¡por descontado!— se realiza mediante una transmisión con caja de una velocidad, con la palanca situada ahora entre el conductor y el asiento del acompañante, y los selectores de la transmisión automática (P, R, N, D, B) ubicados junto a la propia palanca.
En posición ‘B’, el conductor puede variar el grado de recuperación de la energía durante el frenado. El e-Bulli alcanza una punta de 130 por hora (limitada electrónicamente), frente a los 105 Km/h. del T1 original.
Igual que con el motor ‘bóxer’ de 1966, la combinación entre la caja de cambios con el motor eléctrico integrado en la parte trasera del e-Bulli de 2020 impulsa —ya se ha dicho— las ruedas posteriores, mientras el suministro de energía viene dado por una batería de iones de litio (45 kWh).
Personalizado por ‘eClassics’, este redivivo Bulli cuenta con un sistema de potencia electrónica que, también situado en la zaga, controla los flujos de energía de alta tensión entre el motor eléctrico y la batería, que convierte la corriente continua (DC) almacenada, en corriente alterna (AC). Incluso la electrónica de a bordo funciona con los 12 voltios suministrados por un convertidor DC/AC.
Un ‘enchufe’ enmascarado bajo la placa de matrícula trasera, permite recargar con corriente alterna (2,3 y 22 kW) o continua que, en este segundo caso, puede cargarse en puntos ‘rápidos’ de hasta 50 kW (recarga del 80% en 40 minutos). A plena carga, la autonomía del e-Bulli alcanza los 200 kilómetros.
Se mantienen las 8 plazas del Samba original, aunque con unos asientos tan restaurados… que se han fabricado de nuevo, como sus tapizados, también de nueva factura; lo mismo que el gran techo plegable que, ahora como entonces… ha acabado por convertirse en toda una seña de identidad.
También se conserva el diseño original de la instrumentación, aunque con el ‘peaje’ de una pequeña pantalla digital para la información del estado de la batería y la autonomía del vehículo; innovación que no sólo se centra en el histórico velocímetro, también se traslada a una pantalla integrada en el techo, que proporciona mucha más información adicional con, el hoy ‘imprescindible’, acceso a Internet, la conectividad para los teléfonos portátiles, amén de informaciones específicas en un modelo eléctrico (uso de energía, recuperación, rango de alcance…).
Por lo demás…chasis modernizado, ejes multibrazo en ambos trenes, con amortiguadores y suspensiones ‘coilover’ ajustables, nueva dirección de cremallera y cuatro frenos de disco ventilados.
Para que nada falte, en la magia de la ‘reconversión’… dos tonos de pintura: «Naranja Metálico Energético» y «Metálico Matte Arena Dorada», mientras los faros redondos —¡sólo faltaba!— montan ahora tecnología led , incluyendo luces diurnas.
En fin, que el T1 ‘Hippy’… revive su mágica historia.