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Victoria en Le Mans… medio siglo después

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Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

J. F. Z.

Cincuenta años… nos contemplan. ‘Il Cavallino’ de Maranello continúa haciendo historia, escribiendo otra página —una más— en su epopéyica trayectoria vital… y deportiva.

Ahora, en el centenario de la carrera de Resistencia más famosa del mundo, disputada este pasado fin de semana en las no menos epopéyicas ’24 Heures’: el 499P nº 51 de la formación oficial ‘Ferrari AF Corse’, conducido por Alessandro Pier Guidi, James Calado y Antonio Giovinazzi ha cruzado victorioso bajo la ajedrezada, tras cubrir 342 vueltas al trazado galo de La Sarthe; mientras el 499P nº 50 —guiño histórico en su dorsal— del español Miguel Molina, Antonio Fuoco y Nicklas Nielsen terminaban en quinta posición tras verse retrasados durante la noche por unos problemas técnicos —y consiguientes reparaciones en boxes— que acabaron apartándolos de la lucha por el podio, aún a pesar de una excelente actuación que llevaría a los ‘tres del 50’ a recuperar varios puestos en carrera.

Al cumplirse la vigésima hora de carrera, el nº 51 comenzaría a destapar el ‘tarro de las esencias’, abriendo el camino hacia la victoria, en tanto que el ‘51’ rodaba séptimo tras perder hasta seis vueltas durante la noche.

Tras 261 giros, a escasamente cinco horas de la bandera a cuadros, Pier Guidi defendía una ventaja de 4’908 minutos sobre su inmediato seguidor, a la vez que el protagonismo del ‘51’ cobraría fuerza durante la noche, con Calado librando una apretada batalla contra el único Toyota que se mantenía en carrera, completando así un triple ‘stint’ antes de entregar el volante a Giovinazzi.

A pesar de la reducción de ritmo experimentado por el Hypercar de Maranello, entre las vueltas 183 y 207, Pier Guidi realizó dos perfectos ‘stints’, consiguiendo enjugar así un déficit de 40 segundos con su rival nipón, lo que permitiría a Ferrari recuperar el liderato.

La diferencia crecería a un minuto hasta la décimo octava hora, cuando el 499P nº 51 tuvo que hacer una para en boxes más larga de lo esperado (cambio de piloto incluido), perdiendo así la ventaja acumulada… y la cabeza de carrera, lo que obligaría a la formación transalpina a volver a la pista por detrás del Toyota de Buemi: dos vueltas más tarde, el campeón del mundo de la especialidad recuperaría el primer puesto, tras un espectacular adelantamiento en la segunda chicane de la mágica recta ‘Hunaudières’.

El incidente que afectó al nº 50, se produjo justo antes de las 2 de la madrugada, relegando a Fouco a la tercera posición como consecuencia de los daños sufridos en el radiador del ERS, causados por el impacto de una piedra durante la vuelta 120, lo que obligaría a los mecánicos a volver a realizar ‘intensas’ reparaciones en boxes; consecuencia: el nº 50 volvería a pista en duodécima posición, tras perder seis vueltas; a falta de cinco horas para el final de la prueba, rodaba séptimo, cinco giros por detrás de sus compañeros de Scuderia.

Dato para la historia… con las primeras luces del alba, los espectadores volvieron a ‘cuajar’ las gradas del icónico La Sarthe, las del centenario; justo antes de la última parte de la carrera… superando en 300.000 almas la parroquia de las ’24 Heures’.

Este décimo triunfo absoluto de ‘Il Cavallino Rampante’ en Le Mans, que viene a unirse a los conseguidos en 1949, 1954, 1958 y 1960-65, contabilizando la trigésimo novena victoria de Ferrari, incluidas las veintinueve de Clase; un resultado, el de esta cuarta ronda del Campeonato Mundial de Resistencia FIA 2023, que permite a Ferrari mantener el segundo puesto en la clasificación de Constructores, con los nipones de Toya a 19 puntos.

Y no sólo, también ‘transporta’ a las vitrinas de Maranello la exclusividad de un trofeo único —unido la originalidad de su diseño— el del Centenario de las 24 Horas de Le Mans… ¡Forza Ferrari!