Gastronomía futurista en la ciudad del cocido
Desde los grandes chefs a las tascas más añejas, desde la cocina internacional y regional, la gastronomía madrileña se presenta como un gran contenedor de influencias en el que tienen cabida todas las propuestas. En Madrid es posible conocer la última propuesta de Sergi Arola a tomarse una tapa de bacalao a la vera de la Puerta del Sol.
Por supuesto que hay locales con historia que son ellos mismos reclamo y los que provocan que se conviertan en lugar de peregrinación. De Casa Lucio al Asador Donostiarra, además de ser puntos cotidianos de comidas importantes, hay una larga lista de grandes templos del arte del comer. En Madrid también hay una gran apuesta por el vino.
Y puede que, últimamente, sin desmerecer a otros barrios, puntos como el popular barrio de Malasaña o en las calles que discurren entre Chueca y la Gran Vía, como arteria catalizadora de buena parte del ocio madrileño, ha surgido una propuesta que aporta tanto de diseño como de buen gusto. Son los locales que se han centrado en ofrecer una cena en condiciones que dé paso a la mítica noche madrileña. La zona de Santa Ana es también otro punto neurálgico para los que quieren salir de noche pero con el estómago en condiciones.