Pista-¦

Sin demasiada altura libre al suelo (180 milímetros) ni tampoco demasiado ángulo de ataque (19 grados, 26 grados de ángulo de salida) y con unos neumáticos «así de anchos» (225/50 R17)-¦ el Yeti no tiene complejos a la hora de rodar fuera del asfalto, a condición de hacerlo -”eso también-” por pistas en aceptable estado de conservación. Estamos al volante de un SUV, conviene no olvidarlo, nunca un todoterreno puro y duro . La clave: tracción total de cuarta generación, con embrague Haldex, como la que montan sus hermanos mayores Octavia 4x4 y Superb 4x4.

En utilización normal, el 96% del par va al tren delantero y el 4% restante al trasero. En situaciones de baja adherencia, el sistema transmite automáticamente el 90% del par al eje posterior y a ambas ruedas, habida cuenta la posición zaguera del diferencial.

La tracción 4x4 del Yeti funciona solidariamente con el ABS y el ESP. Una sencilla tecla «off road» «personaliza» el funcionamiento del ABS, el control de tracción TCS y la ayuda al arranque en pendiente EDL, que sirve tanto para ascensos como para descensos muy acusados donde actúa un sistema de frenado automático.