Famosas que lo cuentan
En mayo del 2005, a punto de cumplir 37 años, Kylie Minogue anunció que le había sido diagnosticado un cáncer de mama en fase temprana y que debía suspender su gira mundial. En ese momento, varios amigos de la cantante, entre ellos Olivia Newton-John, que también ha vivido su particular batalla contra un tumor cancerígeno, hicieron un llamamiento a la prensa para que respetara la privacidad de Minogue. Sin embargo, la ausencia de la cantante duró poco tiempo. Apenas veinte días después de la intervención quirúrgica, reapareció, sonriente, en un hospital de niños con cáncer. Kylie había cruzado la frontera que separa a los que nunca han sufrido esa enfermedad de los que la han padecido, y se sintió parte de una comunidad especialmente solidaria.
Sin aspavientos ni secretismos, con naturalidad, muchas celebridades hacen público hoy en día el diagnóstico de un tumor contribuyendo con ello a desmitificar una de las enfermedades con peor prensa de la historia. Hoy, Kylie Minogue, como tantas otras mujeres con similar patología, lleva una vida tan activa (en su caso, tan frenética) como antes de pasar por el quirófano. E incluso todavía más feliz, pues ha encontrado el amor al lado del modelo catalán Andrés Velencoso, cuya madre, casualmente, falleció prematuramente a causa de un cáncer de mama.
Cynthia Nixon, la actriz que da vida a la pelirroja Miranda en Sexo en Nueva York reconoció en el 2008 que dos años antes le habían diagnosticado un cáncer de mama y que lo ocultó para evitar el acoso de los paparazzi. Hoy, Cynthia colabora activamente en una organización norteamericana que trata de ayudar a parte de las 1,1 millones de mujeres que cada año son diagnosticadas con una patología que también sufrió su madre en dos ocasiones. Más cercano y reciente es el caso de Encarna Salazar, componente del dúo Azúcar Moreno o el de la esposa del jugador del Real Madrid Sylvie van der Vaart, una valiente mujer que tras recuperarse de un cáncer de mama posó escotadísima y sexy para una revista alemana en la que hablaba abiertamente de su enfermedad. «Ese reportaje me revitalizó», confesó con sinceridad.