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el monarca de bután, el más jóven del mundo, se casará en octubre en una ceremonia «sencilla»
El rey de Bután, Jigme Khesar Namgyel Wangchuck, con 31 años el más joven del mundo, contraerá matrimonio el próximo octubre pero no invitará a las familias reales extranjeras porque quiere una «boda sencilla».
Así lo explicó por teléfono el jefe de prensa de la Casa Real de Bután, Dorji Wangchuck, quien precisó que la novia es una estudiante, Jetsun Pema, a punto de cumplir 21 años y que ya acompañaba al monarca en sus últimos viajes.
El portavoz real apuntó que la boda del llamado -˜quinto dragón-™ de la dinastía Wangchuck se celebrará en octubre, en una fecha aún por concretar, en la ciudad de Punakha, antigua capital de esa remota nación budista del Himalaya.
El rey, coronado en noviembre del 2008 tras la abdicación de su padre, Jigme Singye Wangchuck, anunció hace unos días al Parlamento su intención de contraer matrimonio. «He encontrado a una persona y se llama Jetsun Pema. Es joven, cálida, y de buen corazón y carácter. Estas cualidades, junto a la sabiduría que llegará con los años y la experiencia, harán de ella una gran servidora de la nación», declaró el soberano. «Pido al Gobierno que no planee una gran celebración. La felicidad de mi querido padre y la bendición de nuestro pueblo me darán alegría y felicidad», manifestó el monarca, según una traducción del discurso de la Casa Real.
La biografía oficial de la que se convertirá en reina de Bután ofrece pocos detalles, al margen de su linaje, de sus estudios en la India y el Reino Unido, y de su gusto por la pintura y el baloncesto.
La dinastía Wangchuck goza de un gran prestigio en Bután y es célebre por haber ideado el concepto de «Felicidad Nacional Bruta».