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‘JOURNEY’

Mucho más que un viaje

Tecnologías

La sensación de vagar por un entorno inmenso permanece inalterable en la mente del jugador.

Publicado por
IKER CORTÉS
León

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Ante tus ojos, la inmensidad de un desierto de arena, lleno de volúmenes y luces de otra época. Una colina, distinguida con dos estacas de madera y más imponente y pronunciada que el resto de montículos, invita a iniciar el primero de muchos ascensos. Una vez en la cima, Journey se presenta al jugador con las letras de una superproducción videojueguil y arranca una aventura emocional de la que luego es muy difícil desvincularse.

El título de That Game Company cala hondo y se juega como los clásicos, de una tirada. A partir de ahí, no dejará de entusiasmar y sorprender en la hora y media que dura la aventura.

Pero, ¿en qué consiste y a qué sabe Journey ? El juego recoge parte de las mecánicas que han hecho famoso al estudio de desarrollo de software que dirige Jenova Chen. De Flow , (PC y PlayStation 3), el primer juego de la compañía, toma la capacidad de ir ‘alimentando’ a nuestro avatar hasta mejorar sus capacidades. De Flower , la exploración de un vasto y bello universo que, a la postre, será el fundamento y objetivo del juego.

Y es que, más que llegar a un destino, la gracia de lo que propone Journey radica en el viaje. Nuestro avatar, un ser envuelto en una túnica, deambula por un paraje, a primera vista, inmenso. No es tal y, de hecho, cuando el título no quiere que franquees una frontera invisible, la fuerza descomunal del viento te devolverá a la senda marcada. Aún así, la sensación de vagar por un entorno inabarcable permanece inalterable en la mente del jugador.

Espectacularidad

Durante la marcha, el usuario deberá avanzar por un espacio donde los volúmenes cambian —espectacular el efecto de la arena— y aprender ciertas mecánicas —volar, deslizarse por las laderas de arena y activar mecanismos— necesarias para conquistar el final. Mención especial merece la dirección artística del título que, con unos diseños deliciosos —una mezcla entre acuarela y cómic—, demuestra que muchas veces menos es más.

Pero si hay un detalle que hace de Journey un punto de inflexión entre el jugador y lo jugado, ese es el de la relación entre el usuario y otros jugadores que también están afrontando su propio periplo.

El título pone en contacto a jugadores que no tienen por qué conocerse entre sí y les invita a continuar la marcha juntos. Lo más sorprendente es que las únicas interacciones posible entre ambos son las de recargar sus capacidades cuando están juntos y apretar un botón, un gesto que lleva a preguntarse a más de uno si tan necesarias son las palabras.

La excelente música no hace sino poner la guinda al pastel. Original, enigmático y distinto son sólo algunas de las palabras que describen un título que sólo puede adquirirse como descarga digital desde la plataforma online de PlayStation 3. Crítica y público ya están celebrándolo.