Cerrar
Publicado por
fernando mañueco
León

Creado:

Actualizado:

Al final, Estados Unidos ha conseguido evitar el abismo fiscal. El ‘fiscal cliff’ no ha conseguido matar el espíritu de la Navidad bursátil, aunque ha estado a puntito de hacerlo. Se ha conseguido, in extremis, un acuerdo de mínimos que sirve para evitar el peor de los escenarios, para aliviar la tensión y para ganar tiempo. Que no es poco. Pero no ha logrado eliminar la incertidumbre que se abre en el corto y medio plazo. Es un parche. No es la solución a los problemas, ni mucho menos.

Queda todavía mucha tela presupuestaria que cortar en EE.UU. Los analistas de Link Securities aseguran en un informe que «dentro de dos meses volveremos a vivir una situación similar a la de las últimas semanas, ya que las posiciones ideológicas de ambos partidos en materia de impuestos y de gasto público siguen muy distanciadas».

Por su parte, José Luis Martínez Campuzano, estratega jefe de Citi en España, considera que quedan dos importantes retos por superar. Primero, el riesgo de una lectura negativa del acuerdo por parte de las agencias de rating, ya que podría no asegurar la sostenibilidad de la deuda a medio plazo. Segundo, la negociación que se iniciará ya de forma inmediata para elevar el techo de la deuda entre febrero y marzo. Los mercados han celebrado con júbilo la noticia, precisamente porque temían como a un nublado la posibilidad de que EE.UU. y China, a un tiempo, mostrasen enfriamiento económico, justo en un momento en que Europa no levanta cabeza y Latinoamérica empieza a ralentizar su crecimiento..

La preocupación es tanta, que el propio Fondo Monetario Internacional podría recomendar a los países más afectados por la crisis que reduzcan la velocidad con la que están reduciendo sus déficit.

Hubiera sido un desastre, una desgracia planetaria, que EE.UU. cayera en recesión, mientras China reduce su crecimiento y Europa sigue como sigue.. Ya se sabe que sin locomotora, no se mueve el tren... nada más que cuesta abajo. De momento, los últimos indicadores no han sido malos. El PMI de China se ha situado en 50,6 puntos, mientras el índice no manufacturero de los gestores de compras aumentó a 56,1 en diciembre frente a una lectura de 55,6 en noviembre. Son dos datos que avalan la impresión de que la economía del gigante amarillo se recupera y crece incluso a buen ritmo

Dentro de casa, los mercados ponen buena cara. La Bolsa ha pasado en menos de seis meses de niveles inferiores a los 6.000 puntos a cotas superiores a los 8.400, lo que supone una revalorización superior al 40 por ciento. Mientras tanto la prima de riesgo de España ha pasado de los 650 puntos que alcanzó en julio a menos de 400. La rentabilidad de los bonos a diez años ha bajado del 7 al 5 por ciento. No son malas referencias para la subasta de deuda, la primera del año, que celebrará el Tesoro este jueves.