aniversario
grecia, cuarenta años como españa
el país heleno recuerda en medio de una profunda crisis la vuelta de la democracia hace 40 años tras la caída de la junta de los coroneles
Grecia conmemoró el pasado jueves el 40 aniversario del restablecimiento de la democracia, ocasión que la mayoría de partidos políticos aprovechó para reconocer el papel de los que lucharon contra la dictadura de los Coroneles y para abordar los problemas que padece hoy el país, sumido en una profunda crisis.
Era la madrugada del 24 de julio de 1974 cuando el conservador Constantinos Karamanlis volvía del exilio para formar el Gobierno que devolvería a Grecia la democracia que sus ciudadanos habían recuperado pocas horas antes tras la caída de la Junta de los Coroneles.
Cuarenta años después, Grecia, azotada con dureza por una crisis económica que dura ya siete años, conmemoró este aniversario con una ceremonia en recuerdo de los que combatieron la dictadura, y con la referencia al difícil periodo económico que atraviesa el país.
En una ceremonia silenciosa, celebrada en el Parque de la Libertad de Atenas -usado como centro de torturas por la Policía militar-, el presidente de la República, Károlos Papulias, depositó, en presencia de miembros de la resistencia, una corona de flores en el memorial de homenaje a las víctimas.
«Tenemos para siempre una deuda pendiente con los que lucharon para derrocar la dictadura. Ningún homenaje es suficiente y no hay palabras para expresar la gratitud necesaria», dijo el presidente griego que se acercó a hablar con cada uno de los presentes.
También la de Papulias es una vida marcada por la resistencia: primero en 1943, cuando tenía tan solo 14 años, como partisano contra la ocupación italiana y la Wehrmacht alemana, y posteriormente, durante la dictadura griega, desde su exilio en Alemania, como colaborador del programa en griego de la Deutsche Welle, desde el que se ejercía una dura crítica al régimen.
Todos los partidos políticos, desde la derecha hasta la izquierda y con excepción del neonazi Amanecer Dorado (AD), coincidieron en alabar el papel de los que participaron activamente en la caída de la dictadura y apoyaron el esfuerzo de restaurar la Democracia.
En un momento en que la sociedad griega no ve signos de recuperación económica, la ciudadanía siente desafección por la política, lo que ha llevado a algunos a refugiarse en la ideología ultraderechista aupada por el partido neonazi Amanecer Dorado.
Por primera vez en la historia griega hay una organización neonazi que hace apología del odio y de la guerra civil. Se pueden hacer muchas interpretaciones de este fenómeno que no nos honra como país y como personas», destacó Papulias.
La formación ultraderechista criticó al presidente por «no decir una palabra sobre la masacre de miles de ciudadanos griegos a través de los devastadores memorandos».
Por su parte, la conservadora Nueva Democracia, el partido del primer ministro Andonis Samarás, destacó que tras cinco años de «sacrificios difíciles» se está llegando «a la salida de la crisis y al camino de un nuevo inicio». En una escueta declaración a la salida de la exposición en el parlamento, Samarás evitó hacer referencias al pasado y se limitó a señalar que este año «habrá veinte millones de turistas», que aportarán liquidez a la economía, y que por eso quería compartir su «optimismo con el pueblo».
Una idea con la que coincidió su socio de Gobierno, el socialdemócrata Pasok, que además criticó la existencia de «mensajes de intolerancia que sueñan con la vuelta a los momentos más oscuros» de la historia griega y llamó a tejer una «estrategia nacional que rechace el populismo y las teorías conspiratorias».
Por su parte, el principal partido de la oposición, el izquierdista Syriza, destacó la pérdida de empleo y de derechos sociales y el aumento de la pobreza.