Cerrar

Coaching to be www.coachingtobe.com

Publicado por
vanessa carreño
León

Creado:

Actualizado:

Si el tiempo se vendiera, valdría millones. ¿Se imagina ir a la tienda y decir «póngame cinco horas y media, por favor»? El tiempo es lo que nadie tiene, lo que todos quieren y lo que tantos pierden. ¿Cuántas veces decimos «no tengo tiempo»? Vivimos en un «corre, corre que no llegas». El trabajo, la familia, las obligaciones, el deporte, los amigos, el ocio… Todo el día de un sitio para otro y al final no hemos hecho ni la mitad de lo previsto. Sentir que nos falta tiempo nos provoca estrés.

Y, aunque es evidente que todos tenemos veinticuatro horas al día, hay quien parece que hace malabarismos con el tiempo. ¿Cómo? Pues así:

Saben en qué gastan cada minuto del día. Si usted no lo sabe empiece hoy mismo a observar, durante al menos una semana, en qué invierte su tiempo.

Saben distinguir lo importante de lo que no lo es. Que no todo es igual de importante, no se engañe. En un día puede haber una o dos cosas importantes. Y diferenciarlas le ayudará a coger aire. Pregúntese, ¿qué es lo más importante que tengo que hacer hoy? Y si solo pudiera hacer una cosa, ¿qué sería?

Conocen las variables «urgente» e «importante» y las aplican. Es decir, saben que lo primero es ponerse con lo urgente e importante. Después con lo importante, para que no se vuelva urgente. Y ya. Porque lo urgente y no importante, mejor delegarlo. Y el resto ni se lo plantean.

Saben para qué hacen casa cosa. ¿Para qué hago esto? ¿Me dirige a mis objetivos? Hacemos y hacemos, cuanto más mejor, sin importar si lo hacemos bien, si lo disfrutamos o si es para algo. Recuerde: no tiene que hacerlo todo.

Tienen claras sus prioridades. Y las hacen. Nada de estar con la mente en el futuro planificando. Mejor estar en el presente y haciendo.

Saben decir que no. Porque no tenemos tiempo, pero lo regalamos. Y así no se puede. Entienda que cuando alguien le pide algo tiene dos opciones: decirle que sí o que no. Y esa persona lo sabe. O es dueño de su tiempo, o lo son los demás.

Y, por favor, no diga que no tiene tiempo para tener tiempo. to