Diario de León

una banda de nota

música para 160 años

CUANDO SE CUMPLE más de un siglo y medio DEL NACIMIENTO DE LA BANDA MUNICIPAL DE MÚSICA DE la bañeza, la agrupación estrena reglamento. décadas y décadas poniendo acordes a los acontecimientos de una ciudad que ama y abraza la cultura

Elisa Pardo, con músicos de la banda, en 1954.

Elisa Pardo, con músicos de la banda, en 1954.

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a.g. valencia
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En 1856 reinaba Isabel II, fue el año en que se fundó el Banco de España y la fecha en la que murió Schuman. La Bañeza aún no tenía el título de ciudad —llegaría en 1895— pero en la localidad ya entonces estaba constado el amor por la cultura y la música. Tanto es así, que al comienzo de la década la orquesta de aficionados tocó por el alumbramiento de la reina y por la entrada del duque de la Victoria en Madrid. El libro que repasa el 150 aniversario de la banda municipal de La Bañeza —hoy ya son 160 los años que tiene la agrupación— publicado por Ana Isabel Santos Posada en 2006, sitúa los primeros pasos de la banda en 1856, cuando el entonces Ayuntamiento bañezano publicó en los periódicos Las Novedades y La Esperanza la vacante de la plaza de Músico Mayor de la Milicia Nacional de la Villa de La Bañeza, con un sueldo de diez reales diarios. Así fue como el 12 de abril de aquel año se elige a Joaquín Ricci para el puesto de director, el primer director de la banda. En total, en estos 160 años veinte han sido los profesionales que han llevado la batuta de una de las agrupaciones con más solera de la provincia, pues con esta iniciativa del Consistorio de mediados del siglo XIX la localidad se adelantó a muchas ciudades o capitales de provincia.

Como recoge el estudio de Posada quizá el primer gran acontecimiento al que la banda puso música fue el paso de los reyes por La Bañeza. Isabel II y su marido, Francisco de Asís, regresaban de Galicia, y en la ciudad sonó la Marcha Real. Fue el 16 de septiembre de 1858.

La banda siempre ha estado presente en los acontecimientos que a lo largo de este siglo y medio han acompañado a la ciudad. La inauguración de la estación del tren, del puente de Requejo, Navidades y Carnavales, conciertos, partituras y un sinfín de momentos que siempre han llevado los acordes hasta la actualidad, formando una gran familia que los bañezanos sienten como suya.

Aunque el primer director llegó en 1856 no sería hasta 1873, con la primera República al frente, cuando se promulga el primer Reglamento de la Banda. Curiosidad o casualidad, después de más de cien años, la concejalía de Cultura ha aprobado este 2016 el nuevo reglamento de la agrupación, actualizado ya acorde a los tiempos.

Aquella normativa del siglo XIX recogía que la orquesta se compondría de 40 instrumentos como máximo, con la obligación de los alumnos de asistir a las clases diarias de solfeo. También fijaba que la banda debía tocar sin retribución alguna en todos los acontecimientos civiles y religiosos a los que asista la corporación.

El nuevo reglamento, que entró en vigor hace apenas unos días, el 10 de octubre, es mucho más actual. En él figuran los objetivos de la banda, como fomentar el conocimiento musical, satisfacer las necesidades musicales de la ciudad o participar en actividades culturales. También especifica los derechos y deberes de los músicos, las vacantes, los medios de los que podrá disponer la banda o las sanciones.

En estos 160 años son innumerables los acontecimientos en los cuales los músicos bañezanos han puesto la banda sonora. El libro de Ana Isabel Santos hace un repaso cronológico que parte, como no, de la concesión del título de Ciudad a la Villa de La Bañeza. La inauguración del ferrocarril, en 1898, supuso otra celebración con música incluida. Era un paso hacia la modernidad, como la apertura del puente de Requejo, en 1906. La música tampoco faltó en la reinauguración de la iglesia del Salvador, al que asistió el entonces obispo de Astorga, Mérida Pérez, en 1954.

La actualidad de cada momento también ha marcado la historia de la banda. Cuando en 1936 se inició la Guerra Civil la agrupación tuvo que reducir notablemente su actividad, incluso en 1937 el Ayuntamiento publicó un bando donde se pide a los vecinos que no bailen en los con ciertos. La banda también interpretó en 1940 el Himno Nacional al paso de Franco por La Bañeza camino de Galicia y sus músicos salieron en el Nodo.

Otro de los hitos relevantes, que aparecen en la publicación del 150 aniversario, fue el estreno del himno de La Bañeza con música original de Odón Alonso y letra de su hermano Antonio Alonso. Para la puesta de largo se organizó un acto en el cine Salamanca con el Orfeón Leonés y la Orquesta leonesa.

El estreno tuvo repercusión en la prensa provincial. Unos días después del evento, Diario de León publicó: «La fiesta a la que asistieron las autoridades bañezana tuvo un colofón de enorme éxito: el estreno de un Himno a La Bañeza interpretado por el Orfeón y la Banda Municipal bañezana. Este himno tiene música de Odón Alonso y letra de su hermano Antonio, ambos hijos distinguido de la bella y laboriosa ‘chiquita ciudad’ de La Bañeza».

En el recuerdo colectivo también quedará el paso de la banda por el Expo de Sevilla y las celebraciones por el centenario de la ciudad. Pero, 160 años dan para mucho y la banda ha pasado por toda clase de experiencias y circunstancias. La investigación de Ana Isabel Santos Posada también repara en los momentos de desaparición de la agrupación, a veces por causas de fuerza mayor, como en 1904 cuando el Ayuntamiento no lo podía permitir, y otras veces por motivos de organización, como en 1934. Sin embargo, la puerta nunca se ha llegado a cerrar del todo, aunque haya habido momentos de parón, siempre se ha dejado una posibilidad entre abierta. La última de las disoluciones fue en el 77, cuando se puso fin a la cooperativa que se había creado poco antes.

Años, viajes y decenas de acontecimientos. Un estandarte; el de La Bañeza, y una ilusión; la de la música. La banda promete seguir al pie de cañón, en el escenario y en la calle. Uniformados y siempre con el instrumento a punto. La banda y la escuela son ya parte de la esencia cotidiana de la ciudad. Un trabajo labrado durante décadas. Las batutas de 20 directores y mucho de empeño municipal. Ingredientes de una receta que hacen que La Bañeza escriba su historia también en pentagrama.

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