Los jueves... ¡¡Al museo!!

Todos los jueves, de cinco a siete de la tarde, los niños de la Montaña Oriental Leonesa saben que tienen una cita en el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León. Desde que hace nueve años abrió este centro, su programa de actividades para niños de cinco a doce años, llamado Los jueves…¡¡al museo¡¡, ha contado con más de sesenta talleres por los que han pasado cientos de niños.

Desde el museo afirman que esta actividad es una de las que se sienten más orgullosos. «Las actividades formativas y de ocio en la zona rural a veces son escasas para los niños y por eso decidimos crear un programa estable, que ofreciera actividades de calidad, combinando diversión y conocimiento, y todo ello en ocasiones con un trasfondo minero, que permite que los niños conozcan de forma amena la profesión que han desarrollado sus familiares y vecinos», aseguran desde el museo.

Los primeros talleres comenzaron apenas inauguradas las instalaciones y en ellos los pequeños de la comarca pudieron hacer sus primeros pinitos en el teatro de la mano del trovador Crispin D´Olot, conocer el mundo de los minerales con el experto José Vicente Casado y dibujar sus primeras viñetas mineras con dos maestros de lujo, Lolo y Juárez.

Desde entonces, la actividad no ha parado y el aula infantil del MSM ha sido un auténtico laboratorio creativo, con talleres de cine, apicultura, fotografía, minería, mimo, creación musical, arqueología, magia, astronomía, cuentacuentos, micología,…

Incluso estos atrevidos «guajes» le han hecho competencia a este periódico, editando como resultado de su taller de periodismo, el diario La Voz del Valle, donde recogían de forma profesional todas las secciones clásicas de un periódico, eso sí, con su visión particular.

«No es fácil —afirman desde el museo— dados los problemas demográficos de esta zona de León y la dispersión de sus pueblos, reunir a un grupo de niños que hagan el esfuerzo de venir los jueves por la tarde a su cita con el museo». Sin embargo, han debido de encontrar la fórmula del éxito, ya que cada semana veinticinco o treinta chavales esperan impacientes a la puerta del MSM para acudir puntuales a su cita.

«Cuando ves llegar a niños desde Riaño o Boca de Huérgano, que tienen que hacer treinta o cuarenta minutos de viaje, a veces con malas condiciones climatológicas, para participar en nuestros talleres, y que vienen tan contentos, se te ilumina la cara y sabes que estas cumpliendo con una de las funciones que como servicio público tiene que prestar el museo».

Desde el museo valoran también la colaboración que encuentran en los centros de enseñanza de la comarca, su ayuda a la hora de difundir las actividades programadas es fundamental, e incluso ya saben que los jueves por la tarde están libres de actividades extraescolares para dejar hueco a un aula más, la que tienen en el museo.

«Como los niños vienen de diferentes pueblos, algunos muy alejados unos de otros y estudian en diferentes colegios, nuestras actividades también sirven para que se conozcan y son muchas las buenas amistades que se han hecho en el museo», apuntan desde del centro.

Algunos de estos niños, como María o como Alba, forman parte desde siempre de este programa formativo y para el museo. «Son como de la plantilla, los hemos visto crecer junto a nosotros desde que tenían cinco años y a veces hemos tenido que ampliar la edad de los talleres porque se negaban a que no pudieran venir por haber cumplido los doce años».

En este semestre, el museo ha optado por dar a Los jueves… ¡¡al museo¡¡ un aire tecnológico, con el objetivo de que los niños conozcan las últimas tendencias en un mundo , el tecnológico y digital, que avanza muy rápido, y que será sin duda el mundo que les tocará vivir y protagonizar a quienes hoy vienen de la mano de sus padres a los talleres.

Talleres de montaje y vuelo de drones, montaje y vuelo de cohetes y robótica e impresión 3D, llenan cada tarde de jueves las aulas del museo de niños inquietos y muy interesados que ponen en más de un aprieto con sus preguntas a los encargados de cada taller.

Extraordinaria labor la que hace el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León por la educación y la diversión de los niños de la montaña oriental leonesa.