La luna, ese vertedero
El dueño de Amazon, Jeff Bezos, quiere conquistar el satélite para que sea el gran polígono de la industria contaminante.
En la conquista del espacio se jugaba el honor de las superpotencias de la Guerra Fría. Astronautas versus cosmonautas. Pero hoy se ha convertido en pasatiempo de millonarios. Si Elon Musk quiere que su empresa Tesla establezca colonias agrícolas y mineras en Marte, el dueño de Amazon, Jeff Bezos, apunta más cerca y planea colonizar la Luna. La idea es convertirla en el polígono de las fábricas terrestres más contaminantes, que funcionarían a pleno rendimiento con energía solar. «La Tierra no es un buen lugar para la industria pesada», dijo Bezos al recibir el Premio Gerard K. O’Neill de la Sociedad Nacional Espacial norteamericana. «En un futuro no muy lejano, unas décadas, quizás 100 años, será más fácil hacer allí muchas de las cosas que hacemos ahora en la Tierra, gracias a la cantidad de energía». La cuestión es que no lo dice un guionista de series distópicas, sino alguien que dispone de la «mayor fortuna de la historia», 97.000 millones de euros, y está dispuesto a invertirla en su sueño de ciencia ficción. «Debemos volver a la Luna, esta vez para quedarnos», mantuvo Bezos, según Geekwire. «Sucederá, y estamos dando los pasos para hacer realidad esta visión, o me quedaré sin dinero».
Para lograr el objetivo de que el satélite sea el vertedero de la Tierra y la sede de la empresa más contaminante, el hombre más rico del mundo tiene otra compañía, Blue Origin, que subvenciona con su propia fortuna: cada año vende acciones de Amazon por un valor de 900 millones de dólares, que destina a la investigación aeroespacial y a la construcción de cohetes.
Blue Origin, fundada en el año 2000, persigue lo mismo que Tesla: reducir el coste de los viajes interplanetarios, con la construcción de naves reusables. Con motores de hidrógeno líquido tiene dos prototipos, ‘New Shepard’ y ‘New Glenn’, con los que recorrer la distancia al satélite en «un par de días». A largo plazo el objetivo es crear colonias humanas en la Luna, y aprovechar los depósitos de agua que tiene en sus polos. «Es como si alguien los hubiera puesto allí para esto», aseguró el visionario Bezos, cuyo plan incluye salvar el medioambiente terrestre al eliminar la superpoblación mundial (que flotaría en el espacio) y los residuos tóxicos de los productos que se consumen en la Tierra y que él ‘reparte’ en buena medida.
La primera pieza
Desde luego, el plan de negocios no se basa sólo en el financiamiento de Amazon. Bezos invitó a agencias espaciales como la Nasa y la europea ESA a unirse en la construcción de un módulo lunar, primera pieza del asentamiento permanente. «Lo haremos, incluso si la NASA no se suma, pero sería más rápido con una asociación», mantuvo. «Siempre pensé que la idea de ir a Marte sin construir una base permanente en la Luna terminaría de la misma manera que las misiones Apolo». El primer envío ya está planificado: cinco toneladas, quizás en cajas de Amazon.