Compromisos

Es usted de esas personas que se dicen a sí mismas que van a hacer algo y después, con cualquier excusa, no lo hacen? ¿O es de las que (casi) siempre cumple con aquello que se había dicho que haría? Hay quien cree que los compromisos más importantes son los que establecemos con los demás, pero no. Los compromisos más importantes son los que establece con usted mismo, cuando se dice cosas como «mañana sin falta empiezo a hacer deporte», «no vuelvo a gritar así a mis hijos» o «esta tarde le devuelvo la llamada a fulanita».

Estos compromisos, los que establecemos con nosotros mismos, son los más importantes para nuestra autoestima y los que nunca deberíamos incumplir. ¿Por qué? Porque cada vez que nos decimos que vamos a hacer algo y después no lo hacemos, nos estamos fallando a nosotros mismos, faltandonos al respeto y comportándonos como si nuestra palabra no tuviera ningún valor.

Y si no es capaz de verlo, piense en cómo se siente cuando alguien le dice que va a hacer algo y, una y otra vez, no lo cumple. ¿A qué se siente decepcionado? Pues con uno mismo es igual. Incumplir nuestros compromisos, pequeños o grandes, hace que perdamos la confianza en nosotros mismos y que nos volvamos inseguros e incapaces de tomar decisiones.

Así que si quiere recuperar la confianza en usted, a base de respetarse y cumplir con su palabra, aquí tiene dos claves que le ayudarán, y que sirven para los compromisos que establecemos con nosotros mismos y también para los que establecemos con los demás:

—Si no está seguro de que va a hacer algo, no se comprometa. Hágalo sólo cuando sepa que sí lo va a hacer.

—Si ya se ha comprometido y no quiere o no puede hacerlo, renegocie. Hágalo conscientemente y sin ponerse excusas. Establezca un nuevo compromiso, tal vez más pequeño, pero que sí esté dispuesto a cumplir. Por ejemplo, «hoy no voy a devolver esta llamada porque estoy muy cansado, pero le voy a enviar un whatsapp para explicárselo y mañana sin falta le llamo». Así de fácil, así de honesto y así de respetuoso.