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Aventura con sabor leonés

El andinista leonés Javier Fernández, junto a su compañero Óscar Díez, se adentran en el corazón de los Andes argentinos coronando dos seis miles míticos, el Cerro Mercedario y los Ojos del Salado, para acabar este aventura con un reconocimiento a la cordillera andina.

ÓSCAR DÍEZ HIGUERA

Publicado por
JAVIER FERNÁNDEZ LÓPEZ
León

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Nos encontramos en febrero del 2019, hace algún tiempo habíamos coronado el Aconcagua en aquella emotiva expedición ‘Camino Jiménez’. Nuestros objetivos apuntan ahora a La Ramada y Catamarca, también son regiones muy tentadoras para los andinistas.

El Cerro Mercedario con sus 6.770 metros es la cuarta montaña de América. Aunque esta cordillera, La Ramada, pasa un tanto desapercibida alberga varios seis miles como el Alma Negra (6.200 metros), La Mesa (6.100 metros), Pico Polaco (6.000 metros) o La Ramada (6.300 metros).

La ruta normal es conocida como Glaciar de la Hoyada. Es en estos espacios indefinidos donde la cordillera de Los Andes se sumerge en lo esencial y la naturaleza prevalece sobre cualquier otra forma de vida. El nombre del Cerro es atribuido a la similitud que tiene la silueta con la Virgen de la Merced.

Desde la población de Barreal tomamos un 4x4 que transitará la pista acondicionada por la empresa minera Rio Tinto, es posible que algún puente se encuentre destruido, Al cabo de tres horas nos situamos en Laguna Blanca, a 3.072 metros, con un refugio antaño abandonado pero que conserva algunas paredes y techo que dan cobijo.

Ese mismo día abandonando el camino de los vehículos atacamos por otro, ya en desuso, son los primeros pasos con destino al Campamento Guanaquitos (3.745 metros) en horas lo alcanzamos junto con la bifurcación al Glaciar del Caballito. En Guanaquitos existen pircas —corralitos de piedras— para asentar las tiendas.

La jornada siguiente continuamos hacia el fondo del valle ascendiendo por el arroyo, observamos guanacos con regularidad, la fauna adquiere personalidad, conviven con el entorno, las piedras, la vegetación y la gran montaña como fondo. El valle se abre y encontramos otro campamento, Piedras Coloradas (3.870 metros). Aquí el agua no arrastra sedimento por la mañana y es cristalina. Continuando al norte, la huella no está clara pero seguimos ganando altura y en pocas horas nos situamos en Cuesta Blanca (4.200 metros). llamado así por el campo de penitentes.

El siguiente campamento lo fijamos en Pirca de Indios. Superando las primeras pendientes, muy pronunciadas nos pegamos a la parte izquierda. Donde hay varios caminos, el tiempo sigue siendo bueno y ya estamos a 5.200 metros.

Hasta el último campamento La Hoyada (5.660 metros) las cuestas son agotadoras, la altura hace mella y en los últimos tramos comenzamos a cruzar el glaciar, la zona está muy expuesta a los vientos.

Saliendo de La Hoyada, son ocho horas las que nos separan a la cima con 1.000 metros de desnivel, pasando por El Diente (6.150 metros) sin ninguna señalización y sendero inapreciable. Llegamos a la cumbre a 6.770 metros.

PARQUE NACIONAL EL LEONCITO

Fue creado como Reserva Natural Estricta de la provincia en el año 1994 con el fin de conservar muestras representativas de comunidades vegetales típicas de los ambientes de monte de puna y altoandino, preservando el hábitat de especies amenazadas. En el año 2002 se convirtió en Parque Nacional. En su superficie de 76.000 hectáreas se protegen también sitios históricos, yacimientos paleontológicos y áreas de interés arqueológico, incluyendo una parte del trayecto del Camino del Inca. 

El Complejo Astronómico El Leoncito (Casleo) fue formalmente creado en mayo de 1983 por un acuerdo firmado entre la Secretaría de Ciencia Tecnología e Innovación Productiva, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas y las Universidades Nacionales de La Plata, Córdoba y San Juan. Fue inaugurado en septiembre de 1986 y comenzó su operación efectiva en marzo del 87.

OJOS DEL SALADO

Nos desplazamos a Catamarca, es una región de alturas, el entorno es de características desérticas, gran aridez y sequedad, fuertes vientos y bajas temperaturas en las montañas, estamos hablando de la segunda cima de América.

En la localidad de Fiambalá, conviene una buena preparación tanto física como logística. La primera visita y obligada es al Museo donde se despliega toda la historia de los seis miles desde los pioneros hasta nuestros días. Ya en contacto con nuestro guía Lauro realizamos las compras y conocemos a nuestro arriero.

Ascendiendo por el río Cazadero Grande se llega al refugio El Quemadito, un campamento de arrieros, en unas horas veremos el campamento de nuestro arriero donde hay una gran roca acondicionada con cocina y un comedor improvisado, cenamos un guiso de carne de llama y por la noche el cielo despliega su manto de estrellas contemplando el firmamento austral con la Cruz del Sur.

La distancia horizontal se alarga, la travesía de hoy desemboca en Aguas Calientes (4.200 metros) con abundantes manantiales, la aridez de la zona es notoria y nos absorbe la rutina, calor sofocante por el día y la noche es fría.

El siguiente campamento es Aguas de Vicuña (4.950 metros) donde, a pesar del nombre no tenemos agua. Seguimos optando como en ocasiones anteriores por la expedición de estilo alpino, contamos con caballos y mulas para acarrear los pertrechos y víveres, pero no vamos a retroceder ni dejar campamentos fijos atrás.

Amanece y continuando dirección E nos encontraremos con la Laguna Negra y al descender hacia la izquierda aparece el campo base El Arenal (5.500 metros) un descampado arenoso. Subiendo en rumbo NW alcanzamos una junción de arroyos en la falda de los Ojos del Salado. Nos facilita el acceso por la arista rocosa hasta el Campo de Altura (6.200 metros). Pasando la noche allí nos distan ocho horas para la cumbre.

HISTORIA

Dominante sobre el desierto más extremo del mundo, el Ojos del Salado permaneció ausente de la cartografía oficial que se comenzaba a delinear a finales del siglo XIX. Existen croquis y mapas de esa época que lo señalan más al norte y con una altura de 6100 metros. En realidad, el cerro indicado como Ojos del Salado, era uno menor conocido actualmente como Vicuñas y ubicado unos 12 km al noroeste. Esta altura «oficial» quizá colaboró para que permaneciera olvidado unos años más, quedando relegado en las crónicas de aventureros y científicos-andinistas de principio del siglo pasado.

Ya en 1937 la famosa expedición polaca ‘Segunda a los Andes’ llegó a la región con el firme propósito de alcanzar los picos más altos de América como complemento de sus ascensos al Aconcagua y al Mercedario en 1934. Los europeos establecieron el campo base en el paraje Tres Quebradas y dos de sus integrantes: Szczepanski y Wojsznis alcanzaron la cumbre el 26 de febrero del 37, logrando el primer ascenso.

PARQUE NACIONAL TALAMPAYA

Estando en La Rioja tenemos El Parque Nacional de Talampaya que conserva y protege formaciones rocosas que datan del Triásico, en tonos de rojo, gris y ocre. Atracciones como el Cañón de Talampaya, el Jardín Botánico, la Ciudad Perdida o el Cañón del Arcoíris forman parte de este lugar y decidimos hacerlo caminando.

Talampaya es el único lugar en todo el planeta donde se encuentra una secuencia completa de sedimentos continentales del Periodo Triásico de la Era Mesozoica. Por este motivo fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

MENDOZA

Considerada la puerta del Aconcagua, esta ciudad con más de un millón de habitantes está enclavada en los Andes. Los antepasados españoles e italianos ya vieron en ella el potencial vinícola por la gran aridez. Abundan las bodegas y su visita es uno de los grandes atractivos turísticos de la ciudad.

Desde el verano del 2001 fecha en la que comenzamos nuestra trayectoria andinista, han sido nueve las expediciones desarrolladas. Con casi 9000 kilómetros de longitud, los Andes acreditan ser la cordillera más larga del planeta,  en ellos también se halla la cima de América, el Cerro Aconcagua con sus  6942 metros de altitud.

A 3.800 metros aparece el lago Titicaca, de 8000 kilómetros cuadrados que, entre superficies lacustres, es el lago navegable más alto de la Tierra. Y el desierto de Atacama es el más árido del mundo.

La Cordillera Blanca es el sistema montañoso tropical más alto que existe, con el Huascaran de 6800 m cima de los trópicos. El nevado Alpamayo está reconocido por muchos como la montaña más bella del planeta.

El campo de hielo más vasto del continente lo encontramos en los glaciares de la Patagonia Austral entre Chile y Argentina. Para finalizar el Cotopaxi, en la Avenida de los Volcanes de Ecuador, es el volcán activo más alto que existe, y su vecino el Chimborazo es el punto de la superficie más alejado del centro terrestre, como se puede apreciar es una cordillera para seducir.

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