Icono por generaciones
La actriz que dio vida a ‘Bridget Jones’, cambiando el concepto de protagonista femenina para muchos, celebra medio siglo de vida y da el salto a Netflix
Renée Zellweger nació el 25 de abril de 1969 en la ciudad texana de Katy (Estados Unidos), y por sus venas corren sangre suiza por parte de padre y noruega por la rama materna. Ya desde pequeña se interesó por la interpretación, actuando en obras teatrales durante su etapa escolar. Así, no es de extrañar que, mientras estudiaba en la Universidad de Texas en Austin, Renée asistiera también a clases de teatro, redescubriendo su vocación y dándose cuenta de que quería ser actriz. Pero su carrera tuvo unos comienzos modestos, con pequeños papeles en producciones independientes de bajo presupuesto. Su primer papel protagonista lo tuvo en una de estas cintas desapercibidas para la mayoría, pero con la que su nombre ya empezó a sonar Texas Chainsaw Massacre: The Next Generation. También en 1994. Pero su salto a la fama llegó, también en 1996, con el filme Jerry Maguire en el que trabajó junto a Tom Cruise. A partir de ahí, su carrera comenzó a brillar. Un año después de este galardón, en 2001, le llegó el papel que la consagraría definitivamente: protagonista, basada en la novela homónima de Helen Fielding. Un rol para el que tuvo que ganar 11 kilos y trabajar el acento inglés. «Lo más interesante de este trabajo es la transformación», dijo años después en una entrevista con Efe al respecto de las distintas transformaciones que Bridget y otros personajes le han exigido: «me satisface ese reto, me siento más segura interpretando un personaje cuando no se parece nada a mí».
Tanto la interpretación de Renée, que le valió su primera nominación al Óscar y otra al Globo de Oro, como el filme en sí, fueron un éxito. Y así, el personaje de Bridget Jones se convirtió en un referente femenino para muchas mujeres de varias generaciones, algo que nunca ha pasado de moda.
Un año más tarde en 2002, participó en la película «White Oleander», y en el filme musical «Chicago», con el que ganó su segundo Globo de Oro y tuvo su segunda nominación a los Óscar.