El virus que asustó al mundo

nombre del peligro se bautizó como neumonía asiática, una enfermedad que se inició en China y que pronto se extendió debido a los viajes por avión por países de todo el mundo. En España se produjo algún caso, pero la epidemia nunca pasó de ser una anécdota en nuestro país, al contrario que en lugares como Hong-Kong, en donde la población tuvo que acostumbrarse a vivir con una mascarilla puesta, o Canadá, uno de los países occidentales en donde la enfermedad tuvo más presencia. El pánico desatado provocó una bajada alarmante de los viajes a los países asiáticos. Finalmente, el virus desapareció y la tranquilidad retornó al mundo.