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El Smart crece... para cuatro

No tan singular. Aunque sí más capaz, más potente... y tan caro. El Smart adquiere categoría de auténtico utilitario con la versión Forfour («para cuatro», en inglés) de cuatro puertas y cuatro plazas.

Publicado por
JAVIER FERNÁNDEZ | texto
León

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Tres motores de gasolina (en la segunda mitad del año llegará el diesel) con potencias entre 75 y 109 caballos (Mitsubishi ha colaborado técnicamente) y una tarifa que comienza en 12.950 euros y supera los 15.000 para la nueva apuesta del Smart, que ahora intenta el asalto al siempre competido mercado d los utilitarios con una propuesta bastante menos rompedora que la de su ancestro, aquel simpático «huevo urbano» que, aunque pasado de precio, ofrecía un innegable glamour ... por lo distinto. Se supone que los responsables de la marca, en la órbita de Mercedes-Benz, se lo hayan pensado dos veces a la hora del lanzamiento, pero... a nadie se le oculta que el órdago no es grano de anís. Pagar casi trece mil euros (prácticamente 2,2 millones de las antiguas pesetas) por 75 caballos envueltos en 3,75 metros y con 268 litros de maletero, que pueden llegar -los euros- a los 15.100 (2,5 millones bien cumplidos) si se pretende la versión superior de la nueva gama (109 CV) no parece tarea fácil... para el vendedor. Es verdad que el nuevo Smart Forfour, que comenzará a venderse en abril, evidencia en sus trazos la singularidad estética que siempre ha acompañado a la generalidad del proyecto de «mini-coche», aunque no es menos cierto que lo de las cuatro puertas y las cuatro plazas es, cuando menos, «matizable». Las traseras -las puertas- no pueden calificarse de panorámicas , como tampoco las butacas que alberga, aunque hay que concederle al modelo la ventaja de una evidente modularidad en esa zona. Gracias al sistema de corredera, la zona zaguera del habitáculo, y su maletero, pueden agrandarse o achicarse a voluntad (entre 268 y 910 litros de capacidad para la carga) con lo que queda cumplida la premisa de utilización puntual del Forfour como más convenga. Eso sí, los ocupantes de las plazas delanteras disponen de mayor comodidad y de un ambiente más agradable, con un salpicadero bien rematado y realizado en materiales de alta calidad. Incluso se adopta un volante multifunción y hasta la posibilidad de disponer de un sistema de navegación por satélite. Sus reducidas dimensiones exteriores y el incremento de potencia de sus renovadas mecánicas, el permitirán al Forfour desenvolverse con soltura en el tránsito ciudadano, aunque tampoco puede olvidarse que la amplia oferta del segmento (Mini, Nissan Micra, Seat Arosa, VW Polo, Fiat Cinquecento y hasta las gamas bajas del Punto o del Ibiza) viene a ofrecer parecidas «desenvolturas» con mecánicas tan o más prestacionales. La gracia del Forfour puede estar, y de hecho está, en la posibilidad de elegir entre caja manual de 5 velocidades y, opcionalmente, la secuencial de 6 (siempre en tracción delantera) con lo que, en este segundo caso, el Smart puede golear en comodidad de conducción. Eso, por no hablar de ciertas beneficiosas revisiones al alza en la estructura del Smart inherentes a la aparición del Forfour (suspensión McPherson delantera y en «U» oscilante trasera) y control de estabilidad ESP de serie. También en «distinción»... por llevar entre las manos algo que no se ve todos los días. La contrapartida es que... habrá que pagarlo.