Los humedales asociados al Canal de Castilla tienen un alto valor ecológicoMedidas de protección

En la Tierra de Campos Palentina, junto al histórico Canal de Castilla, surge un conjunto de zonas húmedas cuyo origen está ligado a la formación de depresiones del terreno, debidas a la construcción de esta gran vía de agua que recorre de este a oeste la geografía provincial. La alimentación hídrica procede tanto de escorrentías superficiales como de las infiltraciones del propio Canal. El alto valor ecológico de estos ecosistemas acuáticos se pone de manifiesto tanto por la variada vegetación palustre y ribereña que presentan, como por las especies faunísticas que albergan, lo que contribuye a aumentar la diversidad biológica y paisajística del lugar. En una reciente investigación, dirigida por la profesora del Área de Botánica en la E.T.S. de Ingenierías Agrarias de Palencia, Feli Santiago, a lo largo de 26 lagunas asociadas al Canal, se han analizado las características hidrológicas y físico-químicas del agua, la morfología de las cubetas y, sobre todo, ha permitido realizar un catálogo de la flora y vegetación acuática y marginal, durante un periodo de cuatro años, tratando de establecer la estructura y fisonomía de las comunidades vegetales presentes en estos humedales. Riqueza florística Los datos más sobresalientes de este estudio ponen de relieve la temporalidad y fluctuación del agua en estos sistemas palustres. En la mayoría de los casos, aunque tengan escasa espectacularidad paisajística (charcas efímeras y pequeñas lagunas), suponen refugios para especies acuáticas muy antiguas desde el punto de vista evolutivo que, mediante adaptaciones muy singulares, encuentran en estos medios un hábitat ideal para protegerse de la competencia y depredación de otros organismos más evolucionados, pero que necesitan del agua con carácter más permanente. La riqueza florística global asociada a estos humedales queda reflejada en un catálogo de 234 especies, que se ha dividido en tres categorías: hidrófitos (vegetación presente dentro del área que se inunda), higrófitos (plantas enraizadas con hojas totalmente emergidas, a veces sobre tallos que salen verticalmente del agua) y flora asociada (plantas que pueblan las praderas perilagunares y bordes del talud que forma el Canal). Como aspecto fisonómico característico de este conjunto lagunar, hay que destacar un importante número de taxones que pueblan las praderas próximas a las lagunas (pastizales higrófilos, pastizales secos y nitrófilos, y pastizales de desecación estival) así como el talud del Canal de Castilla (vegetación arbustiva y arbórea). La importancia de los sotos y de la vegetación acuática está en estrecha relación con los ciclos ecológicos y biológicos de invertebrados y de la comunidad faunística en general. Estos medios ribereños albergan una rica avifauna, sumamente variada entre las que destacan ardeidas, rapaces, picos, palomas y tórtolas, abejarucos, paseriformes, petirrojos, ruiseñores, currucas, zarceros, mosquiteros y páridos. Algunos de ellos son casi exclusivos de estos medios, como las colonias de garza real e imperial o las poblaciones de aguilucho lagunero. De acuerdo con la valoración de las lagunas según criterios botánicos, que utilizan índices basados en la importancia de los hidrófitos y en la diversidad florística de cada enclave, la profesora Santiago destaca la importancia de la laguna de Valdemudo, situada en las proximidades de la capital palentina. Se trata de un humedal de gran extensión con cerca de 30 hectáreas, de las que unas 13 presentan características netamente palustres, mientras que el resto muestra la influencia de una chopera drenada, instalada en su interior. Esta laguna llega a poseer el 47% de todas las especies registradas, destacando la existencia de 17 hidrófitos, que dan lugar a dos tipos de hábitats naturales de interés comunitario, que recomiendan su conservación. Consciente de la pérdida y deterioro de numerosos humedales en nuestro país en los últimos 50 años, la Administración regional ha resuelto incluir todas las zonas húmedas asociadas al Canal de Castilla en el Catálogo de Zonas Húmedas de interés especial de la Junta de Castilla y León. Este catálogo va encaminado a disponer medidas de protección frente a algunas amenazas ya tradicionales de los ecosistemas palustres, como son la desecación para su posterior conversión en cultivos agrícolas o forestales, la contaminación de las aguas a través de vertidos industriales o agrícolas, la destrucción de la vegetación por la quema de rastrojos, la aceleración del proceso de colmatación por aporte de sedimentos finos en sus cuencas o la introducción de especies exóticas como el cangrejo rojo americano. El futuro de estos antiguos humedales pasa por un estudio y seguimiento de la evolución de todas las lagunas asociadas al Canal de Castilla, que permita afrontar con éxito cualquier programa de protección o recuperación que garantice la supervivencia de los organismos animales que habitan en ellas.