Diario de León
Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Se diría más audaz en lo estético y con interesantes innovaciones en el ámbito de la seguridad, el buque insignia del chevron recibe un lavado de cara que le viene que ni pintado a un coche que ya forma parte de lo que se dio en llamar la eclosión del segmento medio alto, en los primeros compases del milenio y que, cuatro años después, se ha confirmado con una excelente opción de compra para quienes pretendan un coche «grande»... sin estridencias. Lo más significativo es que el frontal del renovado C5 toma sus líneas maestras de los trazos que pudieron verse en el prototipo C-Airdream, concepto con el que Citroën dio a conocer por donde irían los tiros en lo que estilismo se refiere. La nueva parrilla, especialmente estilizada y con los chevrones alargándose y entroncándose con los faros, es la auténtica seña de identidad de un actualizado C5 que, entre otras innovaciones, hereda del histórico antepasado DS (el célebre «Tiburón) los faros direccionales con tecnología bixenón. Una aplicación de seguridad que se complementa, como en el C4, con la alerta de pérdida de trayectoria, la suspensión hidractiva y el ESP y ABS de última generación. También la trasera del C5 ha recibido modificaciones estilísticas en lo que se refiere a unos grupos ópticos en forma de bumerán integrados, en su mayor parte, en la zona del maletero, con lo que el conjunto zaguero adquiere así una mayor fluidez y belleza de líneas. La oferta motorística se mantiene intacta en las mecánicas de gasolina (1.8 16v. De 117 CV; 2.0 16v de 143 y V6 3.0 de 210 CV) aunque el V6 cuenta con una nueva caja de 6 velocidades. En el apartado diesel desaparece de catálogo la versión de 90 caballos, de forma que la renovada gama del C5 se estructura en torno a tres HDi, con potencias entre 110 y 138 caballos.

tracking