Una visita al paraíso de las aves
Las Lagunas de Villafáfila son uno de los complejos lagunares más importantes de España y el enclave más importante de Castilla y León para las aves acuáticas y esteparias
|||| La estepa que enmarca a las lagunas en el horizonte y la llanura de Tierra de Campos, solamente se altera con el vuelo de las aves y las siluetas de los típicos palomares que abundan en la zona. En estos humedales, conocidos como las Lagunas de Villafáfila (Zamora), se dan cita anualmente miles de aves migratorias que buscan allí su zona de invernada. Han sido protegidas desde 1986 como Reserva Nacional de Caza, desde 1987 como ZEPA y su conjunto lagunar ha sido incluido en el Convenio Internacional Ramsar de Protección de Zonas Húmedas. La Consejería de Medio Ambiente las ha incorporado a la Red de Espacios Naturales Protegidos, tramitándose su Plan de Ordenación de los Recursos Naturales El gran contenido de sales en sus aguas las otorgó en otros tiempos importante valor económico, al ser utilizadas como explotaciones salineras. El conjunto comprende unas 9 lagunas y varias zonas encharcadas más pequeñas, de carácter estacional, con períodos de inundación y de sequía. El núcleo central de ésta cuenca endorreica lo forma el río Salado, que enlaza con las tres lagunas principales: Salina Grande, Barillos y Salinas de Villarrín. Diversidad biológica El paisaje, de terrenos suaves, amplios horizontes y escasas pendientes, ha sido modelado por la concentración parcelaria con la consiguiente pérdida de linderos, matorral y arbolado y, por tanto, de magníficos refugios para la fauna. Ahora, predominan las tierras de labor que se dedican al cultivo de cebada, trigo, avena y alfalfa de secano, con escasos ejemplares de pino piñonero y almendro y pequeñas alamedas en las riberas y cerca de las poblaciones. En las lagunas alternan especies vegetales típicamente continentales junto a otras capaces de soportar ambientes salinos, lo que confiere a este espacio una importancia singular en la meseta. Las más representativas son la juncia o castañuela, en las zonas inundadas y el gramón, en los bordes. En las zonas libres de inundación se localizan especies arbustivas como taray, zarza, rosa silvestre o retama. La presencia de aves destaca sobre el resto de especies. La reserva alberga una de las mayores poblaciones de aves esteparias y acuáticas de España. Entre las primeras, destacan las avutardas (unos 2.500 ejemplares, la mayor población del planeta), sisones, alcaravanes, ortegas y gangas. Las lluvias y los fríos traen a las lagunas gran cantidad y variedad de especies acuáticas, siendo la más abundante el ánsar común que, junto al ánsar campestre llegan a sumar más de 30.000 ejemplares en algunas ocasiones. Se pueden observar también, avocetas, garzas reales, avefrías, zarapitos o cigüeñuelas. Desde Villalpando (N-VI), la carretera acerca a Tapioles, cuyo nombre hace referencia al tapial, elemento básico junto con el adobe, con el que se construían los muros de las viviendas y los palomares de la zona. Siguiendo la carretera, a la derecha y con ayuda de un telescopio terrestre, se puede observar a la esquiva avutarda, mientras que en la laguna de Barillos se alimentan ánsares, patos cuchara, gansos y ánades. Un edificio con aspecto de palomar indica que se ha llegado a la Casa del Parque, llamada El Palomar , donde poder solicitar información, ampliar conocimientos y planificar la jornada. Desde sus observatorios se identifican gran variedad de aves. Una vez en la localidad de Villafáfila, desde un pequeño pinar se observa a la mayor de las lagunas, Salina Grande y numerosos palomares de diversa tipología. Bordeando la laguna se distinguen a las aves limícolas con sus largos y finos picos y patas explorando las zonas fangosas en las que se alimentan. En los campos de cultivo destaca la silueta de la avutarda sobre el resto de especies esteparias. El semiabandonado pueblo de Otero de Sariegos, acoge cada primavera a la mayor población de Castilla y León de cernícalo primilla, cuyos tejados utiliza para criar. Por último, junto a la gasolinera de Villarrín de Campos, se encuentra la pequeña laguna de San Pedro, donde distinguir, relativamente cercanos, ánsares comunes, fochas o cigüeñuelas.