Volvo introduce mejoras en los S60, V70 y XC70

A mitad de su ciclo comercial y por aquello de «refrescar imagen», Volvo propone una serie de cambios tendentes a seguir manteniendo la aceptación de la berlina S60, un modelo que supone más de la mitad de la ventas del fabricante sueco en el mercado español y que se ha consolidado como un vehículo de gran aceptación. No sólo el S60 se somete a la cura de rejuvenecimiento, también el familiar V70, en sus dos versiones normal y Cross Country, se apunta a la modificación. Los cambios afectan a elementos como las ópticas delanteras (cristal liso y nuevos intermitentes), los parachoques y las molduras laterales, que ahora se ofrecen en el mismo color de la carrocería. También el diseño de las llantas y los asientos (nuevas tapicerías y sistema de ajuste mejorado) han sufrido modificaciones, así como un interiorismo en el que puede apreciarse la renovada decoración del salpicadero y la consola central (nuevos huecos portaobjetos). El BLIS (información de ángulos muertos), el PACOS (desconexión del airbag del pasajero) y el cristal hidrófugo en las ventanillas laterales y los retrovisores exteriores son otros de la interesantes aplicaciones que ahora ofrece Volvo. La información de ángulos muertos (BLIS) merced al retrovisor exterior gran angular (utilizado por Volvo desde 1979) se optimiza con el equipamiento de cámaras digitales en miniatura capaces de registrar las incidencias en una anchura de 3 metros y de 9,5 de longitud (no dan imágenes, se enciende una luz destellante en el salpicadero), con lo que se evitan uno de los riesgos más comunes en la conducción: las posibles colisiones al cambiar de carril siempre, claro está... que se «consulte» el retrovisor, algo a lo que no acostumbra demasiado el conductor medio español. El cristal hidrófugo (repelente del agua) es opcional en los retrovisores exteriores y en las ventanillas delanteras, siempre con cristal laminado, y su tratamiento impide que la lluvia dificulte la visibilidad; además, las superficies que se mantienen secas, también se mantienen más limpias y, paralelamente, el riesgo de que se produzca hielo es menor. El tratamiento debe renovarse cada tres años en las ventanillas, mientras en los retrovisores, menos expuestos por la protección de la carcasa, se mantiene de por vida. En el capítulo mecánico, la incidencia más significativa de las nuevas gamas S60 y V70 / XC70 es la posibilidad opcional (1.650 euros) de montar el chasis dinámico Four-C, estrenado por el fabricante en las versiones «R» y en el buque insignia S80. Se trata de un innovador sistema de chasis autocontrolado que utiliza varios sensores para monitorizar continuamente el comportamiento del coche y, automáticamente, ajustar los amortiguadores (su grado de firmeza) a las situaciones de conducción. El dispositivo permite al conductor, mediante un sencillo botón, variar a voluntad los parámetros de la suspensión: «Confort» (se prima la comodidad de marcha) y «Sport» (menor balanceo de la carrocería, dirección más rápida y mayor contacto con el suelo... grip , que dicen los «carreristas»). Este chasis activo se complementa con el control de estabilidad DSCT, que ahora se monta se serie en todas estas gamas. En el apartado estrictamente motorístico, la versión T5 del S60 incrementa su potencia hasta los 160 caballos (aumento de cilindrada y admisión variable) a la vez que adopta una caja manual de 6 marchas (herencia «R») y también se montan discos de freno mayores. Consecuencia: 6,5 segundos en aceleración de cero a cien y una tarifa de precios que oscila entre 31.995 (S60 2.4) y 43.100 euros (XC70 2.5T). Es verdad que la tarifa sube ligeramente, aunque también los modelos viene mucho más equipados. Por cierto, el XC70 se beneficia también de las adopciones mencionadas, tanto de la caja manual de 6 marchas como de una renovada gestión electrónica en el cambio automático Geartronic de 5 velocidades.