Arte para la basura ¿Verdadero o falso? ? ? ? ? ? ? Las «emergencias» del Musac

|||| ¿Es fácil confundir el arte con la basura? Parece ser que sí. A los creadores debería hacerles meditar el hecho de que no hay feria de arte contemporáneo en la que alguna obra no acabe en la basura por error. Debe ser difícil trabajar en el servicio de limpieza y dilucidar si una lata abandonada es un desperdicio o una «escultura». Eso le ocurrió a una limpiadora de la Tate Gallery de Londres, que tiró al contenedor una bolsa de plástico llena de cartones. Era parte de una instalación del artista alemán Gustav Metzer. «Para hacer una obra de arte vale todo», decía Metzer, «a condición de que se autodestruya en un plazo máximo veinte años». También el británico Damien Hirst sufrió la incomprensión de otra limpiadora, que se deshizo de una instalación compuesta por un cenicero lleno de colillas, botellas y paquetes de tabaco vacíos. La noticia de la limpieza de su instalación -que el museo ocultó durante días para evitar el escarnio- le provocó a Hirst un ataque de risa. Y es que el tema de su obra era la relación del arte y la vida, y este episodio se lo recordó vivamente. Los deslices no son exclusivos de las limpiadoras británicas. También los servicios de limpieza de la ciudad alemana de Frankfurt quemaron una escultura de Michael Beutler al tomarla por basura. El jefe del departamento Frankfurt Limpio, Peter Postleb, asumió la responsabilidad por el «desliz» y dijo que él mismo consideró que las piezas de plástico amarillo que integraban la obra de arte eran desperdicios. El creador de la pieza, el artista Michael Beutler, no se tomó a la tremenda el error, sino que apreció la sinceridad de Postleb y anunció que no presentaría ninguna demanda para ser indemnizado por la pérdida. Los ejemplos son interminables. Tampoco hay que olvidar que con elementos que a priori no merecerían otro calificativo que el de desperdicios, maestros como Picasso o Tápies, por citar dos españoles, han creado magníficas obras. Hay una simpática web en Internet (www.modestypanel.com/artorcrap) que desafía a aficionados y expertos a discernir entre obras de arte e «impostores». El internauta tiene una galería de obras y dos opciones: art (arte) o crap (basura). Un simpático Mister Smile aparece cuando se acierta el reto. España no se salva tampoco. Alguien en una exposición creyó haberse «colado» en una sala prohibida de un museo al comprobar que toda la estancia estaba en obras. Su acompañante, más atento, le advirtió que en la entrada de la citada habitación había un cartel con el nombre de tan singular instalación y del autor. |||| Emergencias, título de la exposición con la que el Musac abrirá sus puertas en abril, reúne parte de los fondos de la colección permantente, integrada ya por 900 obras de 153 artistas. La intención de la muestra es reflejar los problemas que acucian al mundo actual. Con los siguientes temas y artistas: Medio Ambiente (Andreas Gursky, Allan Sekula, Superflex), discriminación (Pilar Albarracín, Carmela García, Cristina García Rodero, Kirsten Geisler, Pierre Gonnord, Isaac Julien, Gilda Mantilla, Marina Núñez, Julia Montilla, Tracey Moffatt, Yinka Shonibare, Trine Sondergaard, Joana Vasconcelos) y desigualdad (Paul Graham, Ángel Marcos, Boris Mikhailov, Zwelethu Mthethwa, Jorge Pineda), puntos en conflicto (Luc Delahaye, Thomas Hirschhorn, Jorge Macchi, Mult iplicity, Simeón Saiz, Pepo Salazar), ocupación espacial (Alexander Apóstol, Sergio Belinchón, Olafur Eliasson, Francesco Jodice, Marjetica Potrc, Corinna Schnitt), movimientos migratorios (Rogelio López cuenca, Valeriano López, El Perro), la alienación del hombre (Shoja Azari, Marc Bijl, Daniel Buetti, Immo Klink, Iñigo Manglano-Ovalle, Toni Oursler, Sven Pahlsson, Fernando Sánchez Castillo), las distintas emergencias culturales (Sandra Gamarra, Mujeres Creando, Anri Sala, Martín Sastre), nuevas estructuras sociales (Eija-Liisa Ahtila, Mira Bernabeu, Enrique Marty), y África, con la obra de Alfredo Jaar Emergency, que da título a la exposición.