CONEXIÓN CON LA HISTORIA
Vigencia del reformismo y de la educación como claves del progreso
|||| «Estamos en una época de reforma y esto conecta con la idea de reformar la sociedad que tenía la Ilustración y que llega hasta nuestros días», señala la profesora de la Universidad de León, Elena Aguado, al resaltar la vigencia del reformismo como camino para «avanzar hacia adelante a partir de lo heredado, no rompiendo con el pasado», añade. La profesora destaca el espíritu «armonicista» de los krausistas ante la situación que vivía España a finales del siglo XIX y principios del XX. «Había dos alternativas, la revolución o la reforma y ellos optaron por la segunda». Si la educación fue entonces una pieza clave en la idea que plantearon los krausistas para «regenerar» España, hoy en día «nadie niega que uno de los pilares del Estado del Bienestar y de la modernización y el progreso es la educación en todos sus niveles», subrayó. En el siglo XXI se han superado problemas como el analfabetismo, al que se enfrentaron aquella generación de «cabezas pensantes», entre quienes destacaron especialmente los leoneses, «la educación es todavía un pilar del progreso». Elena Aguado considera un error ligar exclusivamente el krausismo a la Institución Libre de Enseñanza y destaca la labor de la Asociación para la Educación de la Mujer que fundó el leonés Fernando de Castro y dirigieron después Gumersindo de Azcárate, Manuel Ruiz Quevedo y Rafael María de Labra. También destaca que las ideas para reformar la legislación social que gestaron estos intelectuales todavía tiene vigencia en algunos artículos del Código Civil relativos a los límites de la propiedad. Gumersindo de Azcárate es el padre de esta medida y quien sentó las bases de las reformas sociales que dieron lugar a la creación del Ministerio de Trabajo.