Consejos para no perderse entre platos

De las especialidades del periodismo, la más comprometida es, sin duda alguna, la gastronomía. Así, uno tiene que soportar continuamente preguntas de tan impertinentes como: ¿Marcelino, adónde voy a comer hoy?, o ¿qué sitio me recomiendas para cenar con estos amigos? Y el bueno de Cuevas, que nunca ha roto un plato, en el sentido literal ni tampoco en el de hacerte una mala recomendación, se guarda la primera respuesta que le pasa por la mente -a tu casa, ¡coño!- e improvisa algún buen consejo. Lo mismo en León, que en Sahagún, en Cacabelos... o en Colinas del Campo de Martín Moro Toledano, en esa tasca de la que te cuenta maravillas. Probablemente quizá más por no tener que dar argumentos sensatos a tantas preguntas impertinentes de quien suscribe que por compromiso real consigo mismo y con la editorial que le planteó este excelente proyecto, Marcelino Cuevas, que es la voz y el voto del Diario de León en los asuntos relacionados con la gastronomía -y con el arte- acaba de poner nombe, apellido y criterio, junto a otros dos especialistas -José Antonio Cabañes y Juan Ruiz- al libro Dónde comer bien en Castilla y León , una guía imprescindible para andar por estas tierras de buen yantar y mejor beber que Editorial Everest acaba de poner en el mercado, dentro de su serie amarilla -Visita- sobre temáticas turísticas especializadas. La guía, que referencia 250 establecimientos de las nueve provincias que destacan por su buena relación calidad-precio y su excelente cuidado en la elección de las materias primas, es de gran utilidad para el viajero, porque incluye todos los datos prácticos, sus especialidades, servicios, menús recomendados, características de su cocina y su bodega, decoración, precio medio, etcétera. Además, los autores arriesgan y se comprometen con el lector con una calificación ciertamente bien sencilla: una estrella, recomendable; dos para el establecimiento que cuenta con alguna especialidad especialmente destacada, y tres para la excelencia gastronómica. La selección de restaurantes se acompaña con más de 500 fotografías que ofrecen una imagen rápida de los salones y los platos más significativos que sitúan al lector en escena. Incluye también el libro diversos monográficos de los platos y materias primas más emblemáticos de Castilla y León para informar a quienes no conozcan la cocina de estas regiones de cuáles son sus platos más característicos. La guía se estructura en capítulos dedicados a cada una de las provincias. Tras una descripción somera de su atractivo turístico se ofrece una selección de restaurantes, empezando por la capital y siguiendo por aquellas localidades que merecen una visita. El libro se cierra con un índice alfabético de restaurantes según su clasificación y una relación de artículos imprescindibles para interpretar y elaborar la cocina de Castilla y León. Con este libro, los autores han querido poner a disposición del lector su experiencia como gastrónomos recomendando las mesas de las que guardan los recuerdos más gratos, tanto por la comida como por su evocación visual: su paraje, su calleja, la casa o casona en la que se halla, por su terraza-mirador o por su comedor recogido. Además, han incluido tanto la cocina tradicional como la creativa, uniendo tradición y modernidad para dar cabida a todas las propuestas que desde la honestidad, el trabajo y la dedicación están haciendo de la cocina de esta tierra un nuevo y reconocido referente culinario internacional. Observar, olisquear y catar son las bases sobre las que se sustentan los criterios gastronómicos de cada uno. Pero desde ahora también leer.