Hoteles con mucha historia

Los hoteles son algo así como catedrales de la modernidad. Escenarios de vidas cruzadas donde se viven historias de amor, de desamor, de intriga, soledades, uniones y hasta muertes. Si las piedras de muchos hoteles hablaran, contarían las intimidades de algunos de los personajes más relevantes de la historia. He aquí algunas de ellas. El Nacional. La Habana La lista de personajes conocidos que se han alojado en sus suites, desde su inauguración allá por el año 1930 es tan amplia que incluso han dedicado una sala del establecimiento en honor a estos clientes. Es la galería de los ilustres y en sus paredes sonríen los retratos de Jorge Negrete, Cantinflas, Rita Hayworth, Marlon Brando, Arnold Schwarzenegger, Lola Flores... o nombres más cercanos a nosotros como Victoria Abril o Javier Bardem. Todos ellos visitaron La Habana y durmieron en el Nacional. Su categoría: cinco estrellas. Estilo: colonial y restaurado, aunque un pelín decadente. Es famoso también por la belleza de sus jardines, que, por cierto, ocultan túneles subterráneos. Habitaciones a partir de 100 euros. Y tiene una espléndida cocina y una no menos famosa discoteca. www.hotelnacionaldecuba.com La Mamounia. Marrakech En sus habitaciones han pernoctado desde Rita Hayworth a Alfred Hitchcock. Pero la Mamounia ha saltado a la fama por ser el preferido de Winston Churchill. Agradecidos, los responsables del establecimiento han querido rendir su pequeño homenaje al que fue primer ministro inglés dedicándole una habitación: la suite Churchill, donde se conservan fotos, sombreros y hasta manuscritos suyos originales. El hotel, que siempre aparece en los primeros puestos de las listas de hoteles más lujosos del mundo, tiene unos jardines que deslumbran por su colorido tan poco habitual en la reseca Marrakech. Reformado en 1986, la Mamounia cuenta con 171 habitaciones, 56 suites y tres villas. Dormir: desde 238 euros hasta 3.100 euros que cuesta una villa. www.mamounia.com El King David. Jerusalén Suenan sirenas en la vieja Jersusalén. Es un atentado. Una explosión en la puerta del King David, el hotel más importante de la capital israelí. Lamentablemente, este establecimiento reconoce ya el ruido de las bombas y sabe lo que es volar por los aires. Fue, concretamente, un 22 de julio de 1946. El hoy ya mítico King David cobijaba en aquel entonces la oficina de la Secretaría del Gobierno de Palestina y el cuartel del Ejército británico. Parte del hotel voló por los aires. El recuento: un centenar de víctimas. Hoy en día el hotel está totalmente reconstruido. Y sus instalaciones son demandadas por políticos y viajeros de alto nivel adquisitivo, deseosos de la protección que aporta este bunker de lujo. Habitaciones a partir de 894 euros. www.danhotel.co.il Waldorf Astoria. Nueva York ¿Cuántas personalidades habrán pasado bajo ese mítico reloj de bronce construido en Chicago en 1983? Es la entrada del majestuoso Waldorf Astoria, el hotel de los hoteles. Se construyó en 1931 y casi ochenta años después aún simboliza la elegancia y el esplendor de la Gran Manzana. Ha sido el favorito de presidentes y magnates durante décadas y escenario de películas como El gran Gatsby, Hannah y sus hermanas o Esencia de mujer , entre otras. Recién restaurado, sus 1.176 habitaciones conservan el bello estilo art decó que impregna también las zonas comunes. Habitaciones a partir de 207 euros. www.hilton.com Chelsea Hotel. Nueva York Es el hotel más decadene del mundo. Pero irrepetible. Leonard Cohen le dedicó una balada al enterarse de la muerte de Janis Joplin, clienta asidua del Chelsea. Y Bob Dylan escribió varias de sus canciones en la habitación A17. Corrían los años cincuenta y sesenta. Arthur Miller vivió en él durante siete años, mientras escribía Las brujas de Salem ; Arthur Clarke contemplaba el cielo con un telescopio desde la habitación 10008; William Burroughs, otro inquilino asiduo, escribió en 1965: «Era un hotel sin problemas. Pasaban montones de cosas... asesinatos, suicidios, sobredosis...». El hotel se hizo famoso también por una tragedia: fue allí donde Sid Vicious (bajista de los Sex Pistols) asesinó a su novia Nancy. Fue el edificio más alto de Nueva York hasta 1884. Precio: a partir de 150 euros. www.hotelchelsea.com El Ritz. París Es un gran hotel, ya no sólo por su categoría, sino también por su ubicación, situado en la plaza Vendôme, la referencia del lujo más internacional. Rodeado de tiendas de grandes marcas de joyería, relojería y moda, el hotel Ritz fue uno de los promotores de este pequeño paraíso del glamour parisino más elitista. El hotel abrió sus puertas en 1898 y nació para sorprender. Fue el primer hotel de lujo que dotó de cuarto de baño a sus 106 habitaciones. Todos sus detalles estaban cuidados hasta la perfección. Cuentan que era habitual encontrarse a Ernest Hemingway tomando copas en el bar del hotel. Y Coco Chanel murió en una habitación de este hotel, sola, el 10 de abril de 1971. También Lady Di y Dodi Al Fayed celebraron en este hotel su última cena y las últimas imágenes que se tienen de la pareja con vida son precisamente a la puerta del Ritz. Habitaciones a partir de 610 euros. www.ritzparis.com Puerta de América. Madrid Es un infiltrado, pero merece una mención por su curiosa situación. El Puerta América, de la cadena Silken, ya tiene un hueco en la lista de los grandes. La clave de su fama radica en su novedoso concepto. Cada planta es obra de un arquitecto o interiorista diferente. En total, diecisiete creadores unidos para concebir el primer hotel multicultural: los franceses Jean Nouvel (responsable de la ampliación del Museo Reina Sofía) y Christian Liaigre; el japonés Arata Isozaki (creador del Palau Sant Jordi de Barcelona); los británicos Norman Foster y David Chipperfield; el estadounidense Richard Gluckman; el israelí Ron Arad... No faltan plantas diseñadas por mujeres, como la iraquí Zaha Hadid, la italiana Teresa Sapey (artífice del garaje). Y como no, españoles como Javier Mariscal o Victorio y Luchino. La inversión ronda los 75 millones de euros. El resultado, un hotel de gran lujo con 342 euros. Precios: desde 300 a 1.500 euros.