Ford Fiesta y Fusion, novedades estéticas y técnicas
Ford renueva la imagen exterior de sus utilitarios Fiesta y Fusion, también sus terminaciones interiores y los dota de un inédito, para su segmento, sistema de control de voz. Los precios del Fiesta arrancan en 12.000 euros y en 14.800 para el
Tal como corren los tiempos automovilísticos en el segmento de utilitarios, donde los jóvenes parecen tener un evidente potencial para cualquier fabricante, nadie puede dormirse en sus particulares laureles, así que... El óvalo rompe con el «aburrido» -por serio- diseño del Fiesta y se «atreve» a dotarlo ahora con pinceladas tan «transgresoras» como una tonalidad bicolor en su interiorismo. El rejuvenecimiento del Fiesta se aprecia en unos grupos ópticos delanteros que, bajo una nueva carcasa traslúcida, separan sus tres elementos (faros, posición e intermitentes) cada uno de ellos enmarcados por un anillo cromado. Además, y siguiendo las actuales tendencias, el paragolpes adopta una sobredimensionada «boca» de refrigeración y los antinieblas también cambian de formato. La vista lateral del Fiesta cambia con la inclusión de una moldura protectora en cuña -herencia del Fiesta ST- y en la zaga se montan pilotos de nueva factura y paragolpes redseñados. En el Fusion los cambios no son tan acusados, en parte porque el modelo no necesitaba tanto rejuvenecimiento y en parte también porque sus trazos tienen bastantes menos años a sus espaldas. De todas formas, se incorporan paragolpes de nuevo diseño y molduras laterales más gruesas. Sólo unas pinceladas, aunque significativas en la puesta al día de la imagen del modelo. Los cambios más importantes se aprecien en el interiorismo de ambos modelos. El usuario se encontrará ahora con unas sensación radicalmente distinta al acceder al habitáculo del Fiesta y del Fusion: materiales, terminaciones y aspecto general han cambiado gracias a elementos como la climatización automática o la radio con CD, que son ahora totalmente nuevos. También se adopta un cuadro de instrumentos de mayor tamaño, con lo que se facilita su lectura, y con la posibilidad opcional del ordenador de viaje (145 euros). Todos estos elementos se integran mucho mejor en la estética y funcionalidad de la consola central. Con todo, lo más significativo es la inclusión -inédita en este segmento e incluso en algunos superiores- del reconocimiento de voz V2C directamente «importado» del Focus. Se trata de un sistema que, mediante el llamado bus de red de datos de alta velocidad, permite al conductor actuar sobre diversos parámetros cual si de una auténtica red informática se tratase y sin soltar las manos del volante. Solamente hace falta presionar sobre un mando situado en la palanca de los intermitentes y solicitar con la voz lo que se desea: temperatura del climatizador, destino en el navegador, emisora de radio que se desea o hasta incluso una canción en el cargador de CD o en el MP3. Aprovechando la tecnología Bluetooth, puede activarse el uso del teléfono portátil del coche. El precio total de esta opción de voz es de 270 euros. En el campo puramente estético, el acabado interior de ambos modelos sube hasta 23 las posible combinaciones (antes sólo 8) bicolor en un interiorismo fundamentealmente agresivo en el Fiesta y más elegante en el Fusion un modelo, éste último, enfocado a un público de -teóricamente- mayor edad. Además, la electrónica también permite a cada usuario hacerse un coche «a medida», en el sentido de configurar a voluntad qué puerta quiere desbloquear con el mando a distancia, los destellos de aviso de intermitentes, la información que aparece en la pantalla del ordenador de a bordo, etc.