«No soy ningún bicho raro»

Shirley MacLaine está más activa que nunca. Reina de Hollywood y experta en técnicas esotéricas, la aún chispeante pelirroja de piel lechosa e increíbles ojos azules encadena películas. Recién apagados los ecos de Embrujada, la hermana de Warren Beatty estrena este fin de semana en España En sus zapatos, filme de Curtis Hanson en el que ejerce de abuela de las rubias Cameron Díaz y Toni Colette. Además, pronto presentará al gran público español Rumor has it, donde comparte protagonismo con Jennifer Aniston y Kevin Costner. Acostumbrada a meterse en papeles de mujeres con carácter, Maclaine, que nació en Richmond hace 71 años y se inició en los escenarios de Broadway como cantante y bailarina, está considerada como un bicho raro entre sus colegas. Nominada en cuatro ocasiones al Oscar, galardón que finalmente se llevó con La fuerza del cariño, la protagonista de la inolvidable Irma la dulce nos recibe en su casa de Malibú, desde donde habla de su regreso a la gran pantalla con el esplendor de sus mejores días. -En el filme «En sus zapatos» no interpreta a la típica abuela de Hollywood. -¿Cómo voy a hacer un estereotipo a estas alturas? Las familias con zapatos atados quedan en el pasado, las relaciones familiares han cambiado mucho. Todas las familias son distintas, de cada una se podía escribir una novela porque cada una se mueve en su propio universo. No podía hacer de la típica abuela porque ya no existe. -Vuelve con tres filmes ¿cómo se siente? -Fantástica. Mi regreso es bueno para las mujeres, sobre todo para las mayores. Y a nivel personal le diré que me lo estoy pasando estupendamente con el trabajo. -Durante bastante tiempo ha dicho no. ¿Por qué vuelve ahora y de manera tan visible? -Después del 11-S decidí rendirme a lo que el mundo me pidiera. Dejé de luchar y me entregue por completo. Si te sales de tu camino, la vida se vuelve mas complicada. Acabo de terminar unos guiones que un estudio va a convertir en películas. Lo que me ha pasado es la historia mas vieja del mundo porque he cogido las ideas que el universo me ha ido dando, me he dejado llevar y ahora estoy feliz. -¿Puede explicar ese proceso? -Cuando hablo de rendirte ante las consecuencias, sean las que sean, quiero decir lo de la canción: que lo que tenga que ser, será. Una vez dado ese paso, pensé que no podía manipular desde mi posición de poder y fama, sino que tenía que dejar pasar las cosas sin implicarme. Ya no busco ni me angustio. -Es decir, que ha dejado de controlar su vida. -Desde luego, y eso me ha llevado a vivir mucho más tranquila y ser más feliz. -A estas alturas de su carrera ¿consulta con el director cómo componer el personaje? -Curtis Hanson me dijo que quería una abuela contenida. No había leído la novela en la que se basa la película y sabía que iba a filmarme muy de cerca, lo que me resultó interesante porque daba al papel una visión diferente. Curtis es un cineasta curioso, le preguntas algo y tarda veinte minutos en contestarte, piensa mucho antes de dar una respuesta, y esto conecta muy bien con los actores porque siempre les da una contestación con un plus. -De todo lo que han dicho sobre usted ¿cuál es la mayor confusión que el público tiene de su persona? -Que soy un bicho raro. -Y...¿no lo és? -!Venga ya! Soy una mujer con los pies sobre la tierra, muy directa, sin tiempo para manipular. -Entonces, ¿de donde nace la fama de mujer rara? -De mis libros. A la gente le da miedo investigar asuntos metafísicos.