La Cava de Santa Clara brinda con buen vino por su primer cumpleaños

|||| Dos hombres jóvenes y emprendedores, José Antonio Matilla de la Fuente y Ramón Cabreros Castillo, decidieron ahora hace justamente un año, poner en marcha un proyecto que gira alrededor del vino, ese milagroso elixir que en los últimos tiempos ha conseguido en este país la categoría de gran estrella. El vino, en La Cava de Santa Clara, es tratado como auténtico rey. Sus modernas instalaciones integran una sensacional bodega en la que descansan miles de botellas de los mejores marcas de España y el mundo, en una ambiente que tiene una temperatura constante de 17 grados, la humedad precisa, una iluminación a través de fibra óptica que no perjudique los elementos esenciales de los caldos¿ y todo lo que el elemento vivo que atesoran las botellas vidrio pueda necesitar para mantener sus esencias completamente inalteradas. También han dispuesto una sala de cata para una veintena de personas, en la que se pueden dar cursos de conocimiento del vino y en la que, naturalmente, se ofrecen habitualmente catas de las mejores marcas. Digamos como detalle que cada pupitre tiene un rectángulo de luz blanca para poder aprecias las distintas tonalidades de los caldos que se catan. Pero el vino a palo seco no basta, por ello han dispuesto, además, un pequeño comedor en el que a la vez que se catan las excelencias de los caldos, se pueden degustar algunas delicias gastronómicas, con lo cual se cierra todo un interesante ciclo de la cultura vinícola y gastronómica. Aunque, como es lógico, el gran atractivo es la barra en la que se sirven en copas hasta cincuenta vinos diferentes, alarde que es posible gracias a un dispensador ultramoderno que permite que las botellas abiertas no estén en contacto con el aire en ningún momento y, por lo tanto, que el vino que contienen se mantenga en las mismas condiciones que en el momento de abrir la botella. Todo un lujo que los entendidos clientes que durante estos doces meses de vida visitan a diario La Cava de Santa Clara , agradecen. Si el vino se consume por botellas, lo mismo en la barra que el comedor, simplemente se incrementa su precio con 5 euros para cubrir los gastos del servicio. La oferta de vinos del establecimientos es amplísima, pero con una especial incidencia en los del Bierzo y Tierra de León, mientras que en su carta de tapas, que se pueden convertir en un sugerente picoteo, se encuentran cosas tan apetitosas como unos Puerros de Sahagún y salmón ahumado Carpier con vinagreta agridulce, unas Anchoas del Cantábrico sobre tostas con tomate y frambuesa, una Cecina de León marinada con aceite de oliva virgen y queso curado, un Bacalao ahumado Carpier al aceite de trufa, toda una amplia gama de embutidos ibéricos, e incluso una original Degustación de bellotas. Todo esto en frío. Pasando por la cocina nos encontramos con los Puerro de Sahagún y espárragos trigueros, la Alcachofitas tiernas en su jugo con bacon y jamón de bellota, el Foie de pato Malvasía fresco con reducción de Tawny Porto y guarnición de manzana, las Carrilleras de cerdo ibérico guisadas con patata confitada o los Boletus Edulis salteados. Y para rematar unas exquisitas degustaciones de quesos y unos deliciosos postres dulces. Nuestra felicitación a La Cava de Santa Clara por su primer año de actividad, y nuestro deseo de que las cosas, por lo menos, sigan igual de bien.