Diario de León

Peugeot 1007, «Coche del Año 2006 en España»

El Peugeot 1007 se ha alzado con el prestigioso título de coche del año en la trigésimo cuarta edición del premio que convoca anualmente el rotativo «ABC» y en el que participan, como jurados, más de medio centenar de periodistas especializados

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JAVIER FERNÁNDEZ | texto
León

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Votado por la práctica totalidad de los componentes del jurado, el Peugeot 1007, con un total de 202 puntos, ha obtenido una neta ventaja sobre sus más directos rivales, el Reanult Clio y el Fiat Grande Punto. La innovación de un modelo que se adelanta a su tiempo y la popularización del sistema de puertas laterales correderas de accionamiento eléctrico en un coche utilitario, ha sido el concepto que más han valorado los miembros del jurado en la concesión del más reputado galardón que conceden, desde hace décadas, los periodistas especializados españoles. Con la de este año 2006, es la quinta vez que un producto de Peugeot obtiene el título de «Coche del Año en España», anteriormente lo habían conseguido el 205 (1985), el 206 (1999), el 307 (2002) y el 407 (2005). En esta edición 2006 se presentaban 39 nuevos modelos comercializados en el mercado español entre el 1 de diciembre de 2004 y el 30 de noviembre de 2005. El jurado, compuesto por 56 periodistas que cubren habitualmente la información especializada en nuestro país, disponía de un total de 10 puntos, a repartir entre un mínimo de tres modelos y un máximo de seis, pudiéndose adjudicar a cada modelo un máximo de cinco puntos. Vehículo innovador Aunque puede parecer recurrente en una industria en la que la innovación suele ser bandera, la apuesta de Peugeot por el compacto 1007 sí que «recurre» a este aspecto en, sin duda, mayor medida por las aplicaciones que el fabricante adopta en un segmento utilitario, herencia de realizaciones superiores: interior modulable, puertas laterales correderas y decoración interior adaptable a los gustos de cada usuario. Como tantas veces en la trayectoria productiva de Peugeot, en la construcción del 1007 subyace la idea de popularizar conceptos generalmente aplicados a modelos más sofisticados, y caros, de la producción automovilística. Así, la modernidad urbana de Peugeot, bajo la firma estilística de Pininfarina, se traduce en un coqueto urbanita -con también evidentes aspiraciones ruteras- con el que su fabricante pretende abrir nuevos horizontes en el mercado europeo, también español lógicamente, a base de ofrecer soluciones que acabarán por dar tanto juego que, posiblemente, acabarán ofreciendo otros constructores; basta recordar lo que ha sucedido con el concepto Coupé Cabriolet, que Peugeot inició con el 206 y ha seguido con el 307 y que se han «adoptado» -y adoptarán- en otros modelos de la competencia. El llamado concepto Sesame , las puertas correderas eléctricas, propician en el 1007 casi un metro de hueco para acceder al interior de un habitáculo en el que, además, se pone también en práctica la segunda llamativa innovación, que el fabricante bautiza como Cameleo , consistente en la posibilidad de cambiar, mediante una sencilla operación de maquillaje , las tonalidades del habitáculo (alfombrillas, panelado de puertas, aros de las toberas de aireación y hasta una parte de la tapicería de los asientos). En el capítulo de equipamiento, el 1007 ofrece de serie elementos como el ABS, el control de estabilidad ESP, airbag frontales para conductor y pasajero y laterales para las plazas delanteras, reposacabezas en todos los asientos y la posibilidad de convertir el respaldo del asiento delantero derecho en una práctica mesita. Por lo demás, el 1007 aloja también bajo su capó un nuevo propulsor de 1.4 litros multiválvulas de 90 caballos que se presenta como una opción intermedia en la gama de gasolina, con unos precios que oscilan entre 12.950 y 14.650 euros. PGT

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