La selección de Gourmets y los vinos de León

|||| La nueva edición de la Guía de Vinos Gourmets, la correspondiente a 2006, ha sido madrugadora, ya lleva casi un mes es los estantes de las librerías y quioscos. Se ofrece en ella una selección de los mejores vinos españoles, elegidos por un total de 21 expertos, cuya profesionalidad viene avalada por su formación y experiencia. Entre ellos hay enólogos, químicos, sumilleres, periodistas, etc., los cuales han catado en esta ocasión más de 3.300 caldos de todas las denominaciones de origen del país. Esta guía pondera los vinos con el sistema numérico que va de 5/10 a 10/10 y otorga una serie de premios basados en las votaciones de lectores y usuarios de la Guía de Vinos, quienes a raíz de sus descripciones y calificaciones, son los que deciden que bodegas y caldos deben conseguir el refrendo de los galardones, por su calidad y contribución al desarrollo del mundo vinícola. La bodega premiada en esta ocasión es la de Vega Sicilia, por su rigor, seriedad y atención al cliente. El mejor tinto crianza ha sido el Pintia, de la D.O. Toro. El mejor rosado el Jané Ventura, del Penedés. El mejor blanco de crianza ha sido el Chivite Selección, de Navarra. El mejor espumoso el Agustí Torillo Mata Brut Natural, de la D.O. Cava. El mejor vino generoso, el Gran Barquero Amontillado, de la D.O. Montilla-Moriles. Y hubo, entre otros, un merecidísimo premio especial para Manuel Fariña, por sacar de olvido y relanzar los vinos de Toro. En el extenso cuadro de honor para 2006 de Gourmets solamente figuran cuatro vinos leoneses: El maceración Palacio de Canedo, de Prada, el tinto Peique, el tinto reserva Posada 2001 y el tinto Tilenus Pieros 2001, mientras que la lista se hace interminable, por ejemplo, para las citas de Ribera del Duero y Toro. Creemos que los vinos leoneses debieran tener mucha más presencia en relaciones como esta, tanto por su calidad, como por su originalidad y la acertada labor de elaboración promoción que se viene haciendo en los últimos tiempos. La mayoría de los entendidos están de acuerdo en afirmar que los emergentes vinos de León tienen un gran futuro por sus extraordinarias cualidades y por el serio trabajado de los bodegueros que los elaboran, pero los catadores de Gourmets, aún no se han enterado y siguen el camino más fácil, el de premiar a los de siempre.