Cerrar

Montes Obarenes: cortados, desfiladeros y cascadas

Su principal atractivo son los cañones modelados por la acción de los ríos sobre la roca caliza, hábitat ideal para las aves rapaces entre las que destaca el buitre leonado

Publicado por
M. M. ALLER | texto
León

Creado:

Actualizado:

Los Montes Obarenes se sitúan al noreste de la provincia de Burgos, limitando con la de Álava, en la comarca de La Bureba. Incluidos por la Consejería de Medio Ambiente en la Red de Espacios Naturales, el Consejo de Gobierno de la Junta ha dado recientemente el visto bueno al anteproyecto de Ley de Declaración del Parque Natural de Montes Obarenes-San Zadornil, lo que le convertiría en el espacio natural protegido número 21 de Castilla y León. El espacio natural se constituye como un gran murallón natural sobre las llanas tierras de La Bureba. El paisaje está formado por roca caliza modelada por la erosión de los ríos que han creado hoces, desfiladeros y cañones. Las hoces excavadas por el Ebro en Sobrón, el angosto desfiladero tallado por el río Oca en las proximidades de Oña y la garganta abierta por el río Purón en la sierra de Arcena son los más bellos ejemplos. Desde que el río Ebro abandona Cantabria y entra en la provincia de Burgos por Orbaneja del Castillo, hasta que sale a La Rioja, se pueden observar desniveles verticales que llegan a alcanzar los 200 metros, pliegues, cantiles y crestas de gran interés geomorfológico. Esta accidentada orografía unida a los distintos tipos de suelo y a la ambivalencia climática han favorecido la presencia de una variada vegetación. En la zona conviven hayas con encinas, quejigos y alcornoques; arces y serbales con enebros y madroños; brezos, aulagas y genistas, con tomillos y espliegos y los prados de siega con las tierras cerealistas, sin olvidar los pinares, reflejo de la transición entre las regiones atlántica y mediterránea. En cuanto a la fauna, se han catalogado 128 especies de vertebrados de las que 29 corresponden a mamíferos, entre los que destacan gato montés, nutria, corzo o jabalí. Entre la abundante avifauna (76 especies) las más interesantes son: águilas real y perdicera, aguilucho cenizo, buitre leonado, búho real, garza imperial y tórtola común, así como diversas especies de aves migratorias que se pueden observar en el embalse de Sobrón y sus proximidades. La ruta Desde Burgos, la N-I acerca al viajero hasta Briviesca y siguiendo la CL-632 se llega a la localidad de Oña, en cuyas proximidades existe un estrecho desfiladero tallado por el río Oca. La villa nació a partir de una fortificación medieval, alcanzando su esplendor a raíz de la fundación, en el siglo XI, del monasterio de San Salvador (actualmente rehabilitado como sanatorio psiquiátrico-geriátrico). Un recorrido por sus empinadas calles en torno a su noble plaza con soportales, permite admirar también los escasos restos que quedan de sus murallas y el Arco de la Estrella (única puerta de acceso que aún se conserva), así como las iglesias de San Juan y San Salvador. En ésta última y en el mes de agosto se realizan las representaciones de El Cronicón de Oña. Tras dejar la villa (sin olvidar degustar sus exquisitas y famosas morcillas), la carretera conduce a lo largo del estrecho Desfiladero de La Horadada, hermoso paisaje tallado por el río Ebro y uno de los enclaves más fascinantes de todo el espacio natural. Más adelante, Quintana Martín Galíndez, capital del valle de Tobalina, atravesada por el Ebro, en la que destacan las cascadas de Pedrosa y el Desfiladero del Purón. Allí, este río ha abierto esta espectacular garganta en la Sierra de Arcena configurando un paraje de gran variedad y belleza constituido por un conjunto de cascadas y cortados rocosos que aprovechan abundantes aves rapaces para anidar. Su relativo aislamiento y situación geográfica han convertido a la zona en un muestrario de flora y fauna.